Fernando Vázquez lamentó el pesimismo que se ha generalizado tras la derrota ante el Reus del pasado sábado y reclamó paciencia y fe en el trabajo que están realizando. "Parece que se ha hundido el Titanic o que se han acabado las posibilidades del Mallorca, cuando eso no es así. Creo que tengo un buen equipo y estoy seguro que lo iremos demostrando", dijo ante los periodistas en Son Bibiloni en la previa del encuentro de mañana ante el Cádiz.
El entrenador de los bermellones asume los comentarios negativos de la prensa y de la propia afición tras el primer tropiezo. "Las críticas las siento de lejos. Ni escucho ni leo, pero estoy informado. Sí que oí al público y me enteré de su descontento. Nunca criticaré la crítica, pero me gustaría recordar que empezar bien no es ganar el primer partido, hablamos de los primeros meses", reflexionó en un tono serio. Vázquez mantiene el discurso de que su intención es el ascenso, por mucho que el discurso en la planta noble de Son Moix sea más prudente. "No soy nadie para marcar la política deportiva de la institución, pero yo creo en mi trabajo y mi ilusión es ascender", dijo en primera instancia antes de argumentar su deseo. "No me da miedo, acepto este reto, lo que no podemos pretender es subir en octubre. Será difícil y habrá buenos y malos momentos. Yo me pido lo máximo y eso es lo que les pido a mis jugadores. No me siento fracasado por perder un partido. Este es un camino largo y volveremos a perder seguro, pero seguiremos en pie. Si el equipo me sigue lo conseguiremos", dijo optimista.
El de Castrofeito puso un ejemplo para ilustrar su explicación acerca del objetivo al final de temporada. "Todavía estamos en el kilómetro uno del maratón. ¿Alguien puede decir que el que se adelante ya va a ganarla o el que esté en la cola ya no tenga opciones, cuando solo es el kilómetro uno? Nadie puede decir ya que no cumpliremos el objetivo. Espero que vayamos recuperando posiciones, cuanto antes mejor. Quiero darle a la gente lo que quiere, partidos ganados", subrayó.
Vázquez alabó al Cádiz, que empezó el curso arrancando un punto en Almería. "Es un equipo bien estructurado, bien trabajado, como ya ha demostrado en pretemporada. Es complicado, duro y difícil y en su casa mucho más. Destacan por ser un grupo compacto, defienden y atacan casi todos. Nosotros tenemos que hacer nuestro partido, no nos van a dar facilidades, tenemos que buscar sus puntos débiles y trabajarlos, comentó.
El preparador no ve como algo negativo que el estadio Ramón de Carranza se vaya a llenar, con 25.000 espectadores en las gradas. "Es que eso también nos motiva a nosotros. A nadie le gusta jugar en un campo vacío, será un partido bonito de jugar. Estamos con ganas y el equipo está bien", dijo. Vázquez exige una mayor puntería a sus pupilos. "Queremos controlar los partidos desde el balón, como el otro día, pero con ocasiones y con gol. Si contra el Reus hubiéramos marcado todo habría cambiado", señaló.
Güiza y Ortuño
Vázquez alabó la trayectoria de Dani Güiza, ahora en las filas de los amarillos, y que se estrenó como profesional bajo sus órdenes en Son Moix. "Le hice debutar y me sorprendió positivamente su carrera. Nunca pensé que llegaría hasta donde llegó", manifestó. El técnico también se acordó del exbermellón Ortuño, al que pretendió este verano. "Habrá que tener especial atención. Guardo un grato recuerdo, he tenido cierta afinidad con él, le quería con nosotros porque tiene cualidades importantes y espero que dé un salto de calidad importante, pero que se espere a después de nuestro partido", bromeó para concluir.
