Fernando Vázquez sigue sin soltar el pie del acelerador, pero ayer dejó libre a la plantilla por la tarde. La sesión de la mañana sobre el césped del campo del Fortuna Sittard sobrepasó las dos horas y estuvo centrada, más allá de coger el buen tono físico, en numerosos ejercicios de remate a la portería rival, con centros desde la banda, y la presión que debían hacer los cuatro defensas sobre el ataque. También la zaga ejercitó cómo salir en condiciones desde atrás sin riesgos.