­En situaciones extremas, medidas diferentes. Los capitanes del Mallorca comparecieron ayer ante los periodistas por petición propia para enviar un mensaje de unión y confianza a la afición ante el decisivo encuentro del sábado en el Nuevo Zorrilla. "Ganar al Valladolid es lo único que nos queda. Es verdad que no depende de nosotros, pero si ganamos tendremos más posibilidades de salvarnos", explicó Lucas Aveldaño en la sala de prensa de Son Bibiloni, sentado junto a Yuste, Pereira, Company y Cabrero.

El argentino, que junto al pivote fueron los únicos que hablaron, reconoció que son conscientes de la trascendencia del encuentro: "Está claro que nadie quiere pasar este momento, pero como profesionales hay que estar preparados para afrontarlo. Sabemos que es un momento límite que va a marcar el futuro del club y de todos. Ojalá el domingo estemos todos contentos". El central, uno de los pesos pesados del vestuario, considera que sus compañeros ofrecerán el máximo nivel en Pucela. "Algunos ya han pasado por sutuaciones como esta y lo llevan un poco mejor, por lo que tratamos de contangiarnos positivamente unos a otros. En momentos críticos hemos dado la cara y tenemos que afrontar el partido dando el máximo de cada uno", apuntó. Eso sí, el zaguero admitió que la temporada, pase lo que pase, ha sido muy mala: "Salvar el descenso no es salvar el año, pero vamos a sacar esta situación adelante. Nos jugamos mucho y lo vamos a dar todo".

Aveldaño tiene clara la receta para vencer al Valladolid. "Tenemos que demostrar que somos nosotros los que nos jugamos cosas. Si estamos bien, ganaremos. Los primeros minutos serán importantes", comentó, antes de agradecer el respaldo de uno de los máximos accionistas Andy Kohlberg y del consejero delegado Maheta Molango, en su reunión del martes. "Nos han transmitido un mensaje de tranquilidad, sabemos que tenemos su apoyo y el de los aficionados, les pedimos que confíen en nosotros", comentó satisfecho.

Por su parte, Yuste se mostró seguro de que lograrán la permanencia. "Es obvio que el objetivo era otro y la responsabilidad recae sobre nosotros. Tenemos que dar un último empujón. Ahora tenemos que estar todos juntos porque estamos convencidos de que si ganamos, nos salvamos", comentó. El murciano aseguró que prefiere no estar pendiente de cómo vayan los encuentros del Almería y Ponferradina durante el duelo ante el Valladolid. "Prefiero centrarme en hacer un partido serio y no escuchar cosas externas", dijo. "Asumimos que estamos aquí por fallos propios y ahora tenemos que cumplir con el club y la afición", subrayó.

Preguntado por los malos resultados del Mallorca a domicilio, con solo dos triunfos en todo el curso, Yuste fue tajante. "Lo primero que hay que hacer es no pensar en eso. Las estadísticas no sirven para nada, esto es una final y tenemos que tirar todos juntos", señaló. Además, se felicitó por la respuesta de la afición por su masivo desplazamiento a Valladolid. "Han dado una lección de lo que quieren al club", destacó.