Ganar y esperar. Esta es la tarea del Real Mallorca esta tarde, a partir de las 20 horas, en el Iberostar Estadi. Parece fácil, pero no lo es. El equipo de Fernando Vázquez tendrá enfrente a un Córdoba en racha, que pasa por ser el segundo mejor conjunto a domicilio del campeonato y el máximo goleador, con 57 tantos. Unos números que asustan y que dificultará el objetivo del Mallorca, que no es otro que la permenancia.
Los rojillos tienen en sus manos lograr la salvación esta tarde y evitarse el mal trago de la última jornada en Valladolid, en la que nunca se sabe lo que puede pasar. Para ello debe conseguir hoy los tres puntos. Si es así, estará muy pendiente de lo que suceda en el Tenerife-Ponferradina y en el Almería Mirandés. Una combinación de un triunfo mallorquinista y una derrota del conjunto de Ponferrada daría matemáticamente la permanencia. O una victoria unida a un empate o derrota del Almería, que a priori dispone de un compromiso fácil ya que se enfrenta a un Mirandés que está pensando ya en las vacaciones más que en plantar cara a un rival en un partido que ni le va ni le viene.
Si el Mallorca solo es capaz de empatar contra el Córdoba una cosa es segura: se necesitará al menos un empate en Valladolid para salvar la categoría. Y si se pierde, en función de los resultados que se den en Tenerife y Almería, el Mallorca precisará la victoria y esperar un tropiezo de sus rivales en la última jornada para salvarse. Es decir, podría llegar al partido decisivo sin depender de sí mismo, que es lo peor que le podría pasar al conjunto de Vázquez.
El entrenador gallego no facilitará la lista de convocados hasta esta misma mañana, presumiblemente antes de que él y sus jugadores asistan al partido del filial ante el Zaragoza B, en el que está en juego el ascenso. Pero no se esperan muchas novedades, salvo las obligadas por las circunstancias. Así, Cabrero será el sustituto de Timon, que ante el Elche vio la quinta amarilla por pérdida de tiempo y le impide vestirse hoy de corto. Será, presumiblemente, el último partido de Cabrero bajo los palos del Mallorca porque, en principio, no se cuenta con él para la próxima temporada.
Yuste volverá al centro de la defensa tras cumplir su partido de sanción ante el Elche. De esta forma relegará a Truyols al banquillo pese a su buen partido ante el conjunto ilicitano. No acaban aquí las novedades en defensa porque Vázquez está muy pendiente del estado de Oriol, que no se ha entrenado en los tres últimos días por molestias musculares. En el caso de que no pueda jugar, Company jugaría en el lateral izquierdo mientras que Campabadal, suplente ante el Elche, ocuparía la banda derecha. El resto está disponible, incluido Ortuño, que en el entrenamiento del pasado viernes dio el susto al tener que abandonar el terreno de juego tras un choque con David Costas.
El Iberostar Estadio debe presentar esta tarde la mejor entrada de la temporada e incluso la de los últimos años. Esto si los abonados responden. El club agotó en pocas horas las once mil localidades que ha regalado a cualquier aficionado que se presentara en las oficinas. Teniendo en cuenta que el Mallorca dispone de unos doce mil abonados, dependerá de estos que el estadio presente un lleno absoluto. Desde el club se ha pedido que los abonados que no vayan cedan su carnet.
