­El Mallorca necesita ganar esta tarde a Osasuna para evitar que regrese el miedo. No le queda otra a los bermellones, que tienen un pequeño colchón de cuatro puntos más el golaverage respecto al descenso, que marca el Almería, que no debería reducirse en ningún caso. La dolorosa derrota en Zaragoza, a pesar de la buena imagen, obliga a no volver a equivocarse, sobre todo jugando en el Iberostar Estadio. El problema es que los navarros no vendrán a cumplir el expediente porque están inmersos en la lucha por el ascenso, tanto directo como promoción. Pero ya no puede haber más decepciones en casa. El líder Leganés también asustaba hace dos jornadas y el baño de autoestima entre el mallorquinismo que supuso ese triunfo (3-0) debería prolongarse hoy.

La gran novedad es la inclusión en la convocatoria de Tobias, que no disputa ningún minuto desde la primera jornada, con Albert Ferrer como técnico, en el duelo en Alcorcón. Fernando Vázquez no quiere arriesgarse y, ante la presumible apuesta por Kasim y Aveldaño, prefiere tener a otro central en el banquillo, aunque no tenga ritmo de partidos. Company, ya recuperado del golpe que le obligó a ser sustituido en La Romareda, ocupará el lateral derecho, mientras que Oriol el izquierdo. Sissoko y Damià formarán el doble pivote, mientras que Lago tiene muchas posibilidades de regresar al once en el extremo zurdo, por la sanción de Pereira, mientras que en la derecha estará Arana. Colunga y Ortuño, ahora parecen intocables, formarán la dupla de ataque. Costas y Truyols siguen lesionados y Yuste, un fijo para el gallego, cumplirá el primero de los dos partidos de castigo por protestar en Zaragoza. Coro y Pol Roigé fueron los descartados por decisión técnica.

Por su parte, Osasuna, con el mallorquín Tano en sus filas, apurará sus opciones de pelear por el ascenso directo, un objetivo que se planteaba irrealizable al comienzo del campeonato. Para ello, necesita cambiar su trayectoria de las tres últimas jornadas, en las que ha sumado tres empates sin goles. La expedición osasunista viajó a Mallorca con la baja de última hora del mediocentro Mikel Merino, con un proceso gripal. Se trata de una ausencia importante en el cuadro navarro, ya que Osasuna no ha ganado ninguno de los seis partidos que ha disputado sin él. Una buena noticia para los isleños que deben aprovechar.