El Real Mallorca recurrirá las expulsiones de Lucas Aveldaño y de Héctor Yuste en Zaragoza con la esperanza de que Fernando Vázquez tenga más recursos para reconstruir una defensa en cuadro de cara a la visita de Osasuna el próximo domingo. Sin embargo, el club es escéptico ante el hecho de que sus alegaciones prosperen.

El Mallorca recurrirá las dos tarjetas amarillas que vio Aveldaño con la esperanza de que el Comité de Competición de la RFEF anule al menos la primera. El árbitro Pizarro Gómez, del colegio madrileño, justificó la citada amonestación por "saltar con el brazo en alto impactando de forma temeraria en un adversario". Los servicios jurídicos del club alegarán redacción defectuosa del acta porque en las imágenes de la acción se aprecia claramente que el argentino no saltó en ningún momento.

Más difícil será convencer a Competición de que deje sin efecto la segunda amarilla que motivó su expulsión en el minuto 65. El colegiado madrileño la justificó por "protestar una de mis decisiones", y en esos casos la palabra del árbitro tiene más peso que la del jugador. Lo que el colegiado escribe en un acta tiene siempre presunción de veracidad, así que el recurso tiene muy pocos visos de prosperar.

El club solo podría convencer a Competición en caso de disponer de un audio o un video que desmintiera la versión del colegiado, pero esos documentos no existen.

El propio futbolista dio su versión en su cuenta de Twitter horas después de acabar el encuentro: "Solo le explico al árbitro que un balón de espalda se defiende con los brazos abiertos para cubrir la posición. Nada más. Con todo el respeto que se merece. Por eso me saca la segunda amarilla".

Tampoco será fácil que Competición deje sin efecto la roja a Héctor Yuste. Según el acta, el murciano fue expulsado por "protestar gritando airada y ostensiblemente una de mis decisiones levantándose y saliendo del banquillo". El Mallorca defiende que Yuste no pronunció palabra y Pizarro Gómez se confundió de persona. Cuando le sacó la roja, el preparador de porteros Miki Garro admitió que había sido él quien había proferido un insulto y no Yuste, pero lo único que consiguió es que también él fuera expulsado por "dirigirse a un árbitro asistente en los siguientes términos: 'Sois una vergüenza'".

Protestar no implica expulsión

El Mallorca también es escéptico porque no dispone de imágenes que respalden la versión de Yuste. Solo se le ve fuera del banquillo desconcertado por su expulsión. En todo caso, los servicios jurídicos de la entidad argumentarán que una protesta no debe implicar la expulsión del jugador.

El club tiene de plazo hasta este mediodía a las 14:00 para presentar sus alegaciones. Competición fallará mañana por la tarde. En caso de resolución desfavorable, la entidad bermellona podrá presentar recurso el jueves. El dictamen definitivo se haría público el viernes.