Al importante acto al que aludía el vicepresidente del Mallorca Monti Galmés, el de la presentación del cartel del Centenario, se ausentaron sin motivo aparente el presidente del Comité de Honor de los actos de los primeros cien años del club, Utz Claassen, y el consejero delegado Maheta Molango, la máxima representación ejecutiva de la entidad. El club tiene últimamente el don de pifiarla cuando se trata de presentar algo o a alguien. El día en que se dio a conocer el nuevo organigrama deportivo de la entidad se ausentó de forma inexplicable el director deportivo Miquel Àngel Nadal, ausencia que no supo o no pudo justiticar el consejero delegado. Ayer, más de lo mismo. En la presentación del cartel, que pasa por ser una de las tarjetas de presentación de este histórico momento, fue el presidente y el hombre de Sarver en Palma los que no estuvieron. La visita al Obispo de Mallorca no sirve como excusa porque fue por la tarde. Es verdad que el Centenario coincide con el peor momento del club en las últimas dos décadas, pero esto no significa que hay que despreciarlo. En cuanto al cartel, que opinen los que entiendan.
