Fernando Vázquez evidenció su decepción por el rendimiento de sus jugadores en el encuentro de ayer ante el Nàstic y reconoció que esperaba que sería más sencillo su aterrizaje en el Mallorca. "Está siendo un poco más complicado de lo que pensaba, pero sigo soñando con conseguir algo grande", dijo en la sala de prensa del Iberostar Estadio.

El técnico de los rojillos admitió el mal encuentro de su equipo: "Era un partido que teníamos que ganar y la impresión es negativa, por el mal primer tiempo que hicimos. Cuando un equipo corre por detrás de la pelota no puede hacer nada, nuestro plan era presionarles alto y robarles la pelota, pero no pudimos. Es como si estuviéramos superados por el partido. Una cosa es tener una idea y la otra es materizalizarla".

Vázquez, no obstante, aplaudió la reacción de sus pupilos en la reanudación que sirvió para salvar un punto después de estar 0-2 en el marcador. "Me quedo con la respuesta de mis jugadores en la segunda parte, incluso han podido ganar el partido", apuntó antes de recordar que se vio obligado a realizar algunos cambios en el dibujo táctico para revertir la situación. "Te encuentras en el descanso con dos goles en contra y tenemos que cambiar un poco el sistema y sentar a un central por un delantero. Los jugadores han trabajado muy bien en el segundo periodo", resaltó. El de Castrofeito aseguró que no había asignado un lanzador de penaltis cuando fue preguntado si Brandon, que lo falló, era el elegido: "Se lo hicieron a Óscar Díaz y podía lanzarlo él, pero Brandon se sintió con confianza y creía que lo iba a marcar. El penalti solo lo falla quien lo tira. Nos hubiera venido bien que lo hubiera marcado, pero no le puedo decir nada, asumió la responsabilidad".

Vázquez entendió los silbidos de la afición durante el choque. "La gente está cansada. Le hemos ofrecido un mal primer tiempo y es normal que se enfaden. Quiero cambiar la situación y confío que un día se consiga y así los aficionados estarán contentos".