Brandon Thomas es imprescindible en este Mallorca. Tiene que jugar siempre porque es de los pocos que crea peligro, pero ante el Valladolid cuajó una desafortunada actuación. No estuvo nada fino a la hora de ejecutar sus acciones, incluso en algún momento se mostró algo torpe. El de Cala d´Or pudo haber adelantado a los suyos en la primera parte, pero en ambas ocasiones falló en la definición. En el minuto dieciséis tiró demasiado alto y poco después recortó con acierto a un rival, pero su disparo con la zurda fue muy flojo. En la segunda parte también tuvo presencia en ataque, pero estaba claro que no era su día. Antes de dar un buen pase a Pol que el catalán desaprovechó, ya había puesto a prueba otra vez al portero Kepa. Y en el minuto 87 también se estrelló con el meta pucelano. El máximo goleador del Mallorca, con tres tantos, deberá quitarse la espina ante el Alcorcón.
