Cosas más raras se han visto. El ejemplo del Córdoba de Ferrer está en la retina de los aficionados, cuando ascendió después de estar a un mundo de las plazas de ascenso a diez jornadas para el final. La moderación en los nuevos rectores del Mallorca dominó en su primera comparecencia pública. Está bien. Es una buena medida. Pero de puertas hacia adentro, y aunque no se pregone, se hará un esfuerzo para intentar lo que ahora mismo parece una quimera. Para ello, Molango y sus colaboradores deberán atinar en los refuerzos.
Pero una cosa es que se hable de intentar el ascenso y otra centrarse en la cruda realidad del momento. El nuevo consejero delegado no engañó a nadie en su estreno. "Vamos quintos por la cola y esa es la realidad". Lo primero que hay que hacer es intentar salir de las últimas posiciones de la tabla y, si se llega a tiempo para pensar en el algo más, intentarlo. Tiempo hay. Ahora falta acierto en los fichajes de invierno.
