El Real Mallorca decidirá hoy si coloca una o dos tribunas provisionales detrás de las porterías. El club, asesorado por la Federació de Penyes, tomará la decisión en función del número de aficionados que previsiblemente estarán interesados en ocupar dichas localidades.

Cada una de las gradas tiene una capacidad máxima de entre 1.800 y 2.000 asientos, y el Mallorca duda de si será suficiente con instalar una detrás de una portería o colocar dos, con lo que el aforo se situaría en casi cuatro mil localidades.El club espera que esté todo listo para la primera jornada de Liga ante la Ponferradina, pero se descarta que la instalación esté concluida para el Ciutat de Palma.

Con esta iniciativa se pretende aercar a parte de los aficionados al terreno de juego. Es la primera fase de un proyecto que busca una remodelación integral de Son Moix, incluyendo un cambio de orientación del terreno de juego 9o grados.

3.316 abonados

El Mallorca alcanzó ayer los 3.316 abonados tras una jornada en la que se repartieron algo más de 900 carnets. El periodo de renovaciones acaba el viernes.