Álex Vallejo (Vitoria, 1992) no está dispuesto a dejar pasar la oportunidad que se le está presentando en las últimas semanas. El mediocentro del filial presumiblemente será titular hoy ante el Jaén debido a las bajas de Thomas, por sanción, e incluso de Bigas, por lesión, ya que cualquiera de los dos podría ocupar el pivote. El vasco ha pasado de jugar en los campos de césped sintético de la Tercera División balear a mostrarse en los de hierba natural de la Liga Adelante. Y lo mejor de todo para el Mallorca es que se está adaptando sin traumas y está demostrando que si ha llegado es para quedarse.

Es imposible que olvide su debut en el primer equipo, ya no solo porque lo hiciera como profesional, sino porque lo hizo ante el club de sus amores. Formado en la cantera del Alavés, Vallejo cuajó una buena actuación hasta que las fuerzas le aguantaron, tal y como destacó el propio técnico José Luis Oltra. Al valenciano no le tembló el pulso a la hora de alinearle como titular. Y no se equivocó. Aporta trabajo, consistencia y criterio a la hora de repartir el balón. Intenta llegar al área rival, pero ha demostrado que no es de los que pierden el sitio. Incluso ante los vitorianos dispuso de una clarísima ocasión para marcar al apoyar un contraataque, aunque apenas pudo rematar porque llegó exhausto. "Contra el Alavés hizo un partido muy completo y ante el Numancia hizo un trabajo fenomenal y aportó. Por supuesto que tiene opciones de jugar porque tiene equilibrio táctico", resaltó el viernes Oltra. Ante el Eibar no jugó porque el preparador prefirió a Bigas y Thomas, pero cuando se vio obligado a saltar al campo ante el Numancia, por la expulsión del ghanés, demostró que estaba preparado.

Vallejo llegó la pasada temporada para reforzar al Mallorca B cuando todavía estaba en Segunda B, aunque no pudo evitar el descenso. Es de los que llamaron la atención desde niño. Incluso llegó a estar a prueba en el Manchester City y fue internacional sub-18 y sub-19. Esta semana compareció por primera vez en rueda de prensa y demostró tanta prudencia frente a los micrófonos como la que muestra con el balón en los pies. Ya ha tenido más minutos que Marco Asensio, con el que destacaba en Son Bibiloni. Con humildad recuerda que pertenece al segundo equipo, aunque si sigue así no por mucho tiempo. Seguro.