Cuando las televisiones estornudan, el fútbol se constipa. Y el Real Mallorca ya sabe que Prisa, la sociedad que a través de Sogecable tiene sus derechos de televisión, quiere negociar a la baja el contrato que firmaron el pasado mes de agosto. La entidad balear es conocedora de los problemas de liquidez de Prisa, pero todavía no tiene conocinimiento formal de cuál será la propuesta que le traslade la operadora.

La próxima semana -probablemente el martes- el Mallorca está citado a una reunión informativa con los otros nueve clubes que tienen vendidos sus derechos a Sogecable para saber a lo que se enfrenta y tratar de crear un marco de entendimiento conjunto con la operadora. Atlético de Madrid, Celta de Vigo, Espanyol, Getafe, Osasuna, Real Sociedad, Real Zaragoza, Athletic de Bilbao y Betis son, junto con los bermellones, los clubes afectados por las ´rebajas´ que pretende la operadora.

Desde la operadora se habla de la necesidad de llegar a un "acuerdo sostenible" que incluiría recortes, aplazamientos de pago o ambas cosas. La institución bermellona se remitió ayer a "los acuerdos firmados" con Sogecable, aunque confirmó la cita de la próxima semana con los clubes. Ayer Osasuna y Zaragoza sí habían tenido contactos informales con la televisión.

Prisa se comprometió a pagar al Mallorca 65 millones de euros en tres temporadas, veinte millones más de lo que ofrecía Mediapro en el mismo periodo de tiempo. Esa es la razón que esgrimió el entonces presidente del club, Jaume Cladera, para romper unilateralmente con el G30 y Mediapro, arriesgándose a acabar en los tribunales.

La denuncia llegó y a día de hoy el Mallorca se enfrenta a una reclamación de 21 millones de euros, precisamente lo que teóricamente iba a ingresar de más con Sogecable. Porque esta plusvalía queda en cuarentena hasta no saber cuál será la rebaja que propondrá Prisa.

La operadora comprometió con sus clubes un total de 755 millones, una cantidad que no puede afrontar. Según sus cálculos, será necesario aplicar un recorte de 175 millones. La pregunta es qué parte de ese ajuste le correspondería a la institución rojilla.

No tiene suerte el Mallorca con las televisiones. La demanda del G30 -los clubes que negocian en bloque con Mediapro- es muy grave por la significativa cantidad de dinero que se reclama -diez millones por la cláusula de penalización y once por daños y perjuicios-. Y por si fuera poco ahora Prisa amenaza con un ´tijeretazo´.