A Álvaro Giménez la alegría le ha durado apenas veinticuatro horas, aunque puede quedarse en un susto. El delantero sintió ayer un pinchazo en el pubis en una acción con Conceiçao durante su segundo entrenamiento después de superar una lesión que le mantenía alejado del césped desde el 25 de julio en el estadio De Kuip de Rotterdam, en un amistoso ante el Feyenoord, durante la pretemporada de los bermellones en Oosterbeek (Holanda).

?"Tenemos que esperar la evolución que tiene y mañana -por hoy- veremos cómo está. No se puede hablar de una recaída", explicó a DIARIO de MALLORCA el jefe de los servicios médicos del club, Tomeu Munar. Álvaro fue intervenido quirúrgicamente el 23 de agosto por una osteopatía de pubis y fue cumpliendo los plazos de recuperación sin demasiados problemas. Hasta el miércoles, que por fin pudo completar un entrenamiento con sus compañeros. Pero ayer, en una sesión de mucha intensidad, sintió un pinchazo e inmediatamente se fue al suelo. El dolor le hizo temer lo peor, tal y como evidencian las imágenes adjuntas, pero posteriormente se pudo retirar del campo por su propio pie, aunque cojeando ligeramente.

?El infortunio se ha cebado este curso con la plantilla del Mallorca, que ha llenado la enfermería con muchos más pacientes de lo habitual. Javi Márquez, que se fracturó el tobillo izquierdo; Nunes y Antonio López, con el menisco roto; Joao Víctor, con el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha roto y, Uche, con la misma lesión que el brasileño, ya han desfilado ante el doctor Munar. Además, para el choque ante el Celta tampoco podrá jugar Gio, que padece una lesión en el muslo.