Alcaldes de Baleares piden ante el Congreso poder destinar el surperávit a inversiones financieramente sostenibles

La Federación de Entidades Locales de Baleares (Felib) se ha sumado a la convocatoria de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que alcaldes y presidentes de entidades locales se manifiesten a las puertas del Congreso de los Diputados para visibilizar la situación de "asfixia financiera" que atraviesan los gobiernos locales y reclamar, entre otras cuestiones, poder destinar superávit a inversiones finacieramente sostenibles.

El presidente de la Felib, Jaume Ferriol, ha aseguerado que el Estado está "castigando" la buena gestión que hacen los ayuntamientos. "A pesar de haber ahorrado dinero, no nos dejan invertirlo en nada. Ni tan siquiera en inversiones financieramente sostenibles. Lo único que podemos hacer es cancelar deuda y como la mayoría de consistorios no la tenemos, no nos queda otra opción que guardar los remanentes acumulados en el banco", ha señalado.

La FEMP lleva ya tiempo reivindicando un cambio en el sistema de financiación local, en aras de que cada ayuntamiento tenga la potestad de utilizar el superávit acumulado de ejercicios anteriores.

Sin embargo y contrariamente a lo que vienen reclamando, han recibido dos comunicaciones por parte del Ministerio de Hacienda en las que se les informa que, ante la falta de Presupuestos Generales del Estado, las Entidades Locales deberán destinar el superávit de 2024 obligatoriamente a reducir deuda en 2025, imposibilitando así cualquier tipo de inversión, según ha explicado Ferriol.

"Europa obliga a España a no excederse de un determinado déficit. Y la mayoría de ayuntamientos no sólo cumplimos con ello, sino que incluso ahorramos. Quien no cumple con lo marcado por Europa es el Gobierno Central. Y no es justo que, para equilibrar su exceso de gasto, nosotros no podamos invertir nuestros remanentes en la prestación de aquellos servicios que requieren nuestros vecinos y en la realización de aquellas inversiones que necesitamos en nuestros municipios", ha argumentado Jaume Ferriol.

Es por ello que el pasado mes de abril la FEMP mandó sendas cartas tanto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, reclamando que se ponga una rápida solución a esta situación y que se adopten las medidas necesarias para garantizar la estabilidad financiera de las Entidades Locales

Castigados

"Desde los Ayuntamiento siempre tratamos de llevar una gestión económica eficiente y responsable y nos sentimos castigados por ello. No podemos seguir permitiendo que no nos dejen invertir nuestros remanentes en aquellas cosas que realmente necesitamos en nuestros pueblos y a las que no podemos acceder no porque no tengamos el dinero, sino porque no nos lo dejan utilizar", ha insistido el presidente de la Felib.

Entre las exigencias que los ayuntamientos de Baleares trasladarán al Ejecutivo figuran la aprobación urgente de un real decreto-ley que permita la suficiencia y estabilidad financiera de los ayuntamientos, única vía para salvar la situación actual ante la falta de Presupuestos Generales del Estado.

Reclamarán también la actualización de las entregas a cuenta para 2025 y el abono de las liquidaciones de 2023, cuya ausencia está provocando una pérdida de más de 4.800 millones de euros para las entidades locales.

Las entidades locales también quieren tener la posibilidad de destinar el superávit municipal a las inversiones finacieramente sostenibles, con el fin de revitalizar la economía local.

La convocatoria ha servido igualmente para exigir la convocatoria inmediata de la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL), órgano de diálogo entre el Gobierno y las entidades locales, que no se reúne de forma ordinaria desde hace tres años.

Cabe destacar que las reclamaciones de los ayuntamientos cuentan con el acuerdo unánime de todos los grupos políticos presentes en la FEMP (PSOE, PP, Junts, ERC, Sumar- Podemos-IU) y que dichas reivindicaciones ya fueron trasladadas al presidente del Gobierno durante su intervención en la XXVIII Conferencia de presidentes, celebrada en Barcelona.