La cooperativa invierte 200.000 euros en una nueva calibradora de fruta

Hace unos días empezaron los trabajos de montaje de la nueva máquina calibradora que ha adquirido la cooperativa agrícola Sant Bartomeu de Sóller, que supone para esta institución una inversión que se situará en los 200.000 euros.

Se trata de una máquina que sustituirá a la que hasta ahora estaba en funcionamiento. La principal diferencia con la que se retira, es que la nueva máquina será capaz de calibrar cualquier tipo de fruta independientemente de su forma.

Según explicó el presidente de la institución, Miquel Gual, la nueva calibradora podrá trabajar, además de naranjas, con mandarinas, clementinas o aguacates. Estos frutos tienen la peculiaridad que no tienen forma esférica, por lo que hasta ahora su calibraje se tenía que hacer de forma manual. Ahora, la nueva máquina, tiene la característica de que puede medir el tamaño o el peso de la fruta sin necesidad de tener en cuenta si tiene o no forma circular, explicó Gual. Además, la fruta también podrá llevar hoja, algo que hasta ahora no.

Los trabajos de montaje de la nueva máquina fueron precedidos por la retirada de la anterior, que será llevada al desguace tras finalizar su vida útil. Durante las próximas semanas, se ensamblarán los distintos cuerpos de la máquina y se someterá al período de pruebas, de manera que esté en pleno funcionamiento en la segunda quincena del mes de enero. Este hecho permitirá, según señaló el presidente de la institución agraria, que esté plenamente operativa en el inicio de la temporada de recolección de los cítricos del valle.

A partir del mes de enero se iniciará la campaña de recolección de naranjas en Sóller que se extenderá hasta principios de verano cuando se cosechen los últimos frutos de las variantes más tardías.