Infraestructuras

Quejas vecinales en la Colònia de Sant Pere por la construcción de un aparcamiento

El Ayuntamiento entiende el «nerviosismo» de los vecinos afectados, por ello, parará las obras para explicar los detalles de los trabajos

Quejas vecinales en la Colònia de Sant Pere por la construcción de un aparcamiento

Quejas vecinales en la Colònia de Sant Pere por la construcción de un aparcamiento / Biel Capó

Vecinos de la Avinguda de la Devesa en la Colònia de Sant Pere han criticado que «el Ayuntamiento de Artà ha iniciado, sin aviso previo a los posibles afectados ni trámite de alegaciones, la construcción de un aparcamiento público en una parcela de terreno rústico de uso agrario situada al final de la Avinguda de la Devesa». Los afectados explican que «se ha derribado una parte importante de la pared de pedra en sec que sirve como límite de la parcela rústica y se han extraído importantes cantidades de suelo agrícola, lo cual ha implicado la tala de varios árboles».

Los vecinos también critican que el terreno tiene «una pendiente considerable», por ello, esta actuación «podría suponer un riesgo importante para las viviendas vecinas en caso de lluvias torrenciales, que ocurren con cierta frecuencia en la zona». Los afectados avisan que «el uso de este aparcamiento para vehículos sobre suelo rústico producirá una contaminación en dicho terreno debido a los residuos que puedan desprenderse».

Finalmente, los vecinos argumentan que «el coste que podría suponer esta infraestructura y el alquiler anual de la parcela para el municipio no se justifica, ya que en la Colònia de Sant Pere no existen problemas de aparcamiento».

Plan

El alcalde de Artà, Manolo Galán, ha explicado que este aparcamiento de 3.500 metros cuadrados situado detrás del polideportivo está contemplado en el Plan de Movilidad de la Colònia de Sant Pere. El alcalde socialista reconoce que el Ayuntamiento no ha publicitado las obras que contemplan la adecuación del terreno, quitar un trozo de pared seca y la instalación de una barrera. «Era el mejor espacio para ubicarlo», razona el alcalde que entiende que los vecinos puedan estar «nerviosos». «Puedo entender que sea una molestia», confiesa. Así explica que se pararán las obras, se darán a conocer y si los vecinos quieren alegar, podrán hacerlo.

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