Política

El PP afirma que mantendrá el pacto con Vox en Calvià hasta el final de legislatura

La portavoz del Grupo Popular, Isabel Bonet, atribuye la destitución de un alto cargo de sus socios de gobierno, Fernando Palmer, a su «falta de diligencia»

Amengual y Bonet, durante un pleno de Calvià

Amengual y Bonet, durante un pleno de Calvià / Juan Luis Iglesias

Iñaki Moure

Iñaki Moure

El PP rebajó ayer la tensión con Vox, después de semanas de desencuentros por el centro de menores migrantes proyectado en Calvià vila y el fulminante cese de un alto cargo del partido de ultraderecha por orden del alcalde Juan Antonio Amengual. La portavoz municipal del Grupo Popular, Isabel Bonet, remarcó que, aunque «existen diferencias de criterio como es lógico entre dos partidos políticos tan diferentes», la intención de su formación es «mantener el acuerdo firmado hasta que acabe la legislatura».

De esta forma, Bonet quiso terminar con las especulaciones que había generado la crisis del gobierno municipal y con la idea de que el pacto corría peligro. El alcalde Amengual llegó a asegurar que se avergonzaba de sus socios de Vox por la moción «racista» que habían presentado contra el futuro centro de migrantes.

Ayer, sin embargo, Bonet quiso apaciguar la crisis hablando de que es normal que dos partidos políticos diferentes puedan tener visiones contrapuestas sobre según qué temas.

Fernando Palmer

La portavoz del Grupo Popular sí que quiso matizar los motivos por los cuales el alcalde destituyó al alto cargo Fernando Palmer, un director general que coordinaba las diferentes áreas de gobierno de Vox en el Ayuntamiento. «Se trata de una pérdida de confianza por parte del alcalde debido a la falta de diligencia de esa persona en sus áreas de responsabilidad. Desde el PP no entraremos, en todo caso, en una guerra de declaraciones en los medios», declaró Bonet, en alusión a unas manifestaciones de Palmer a este diario.

El exalto cargo vio su destitución como una «provocación» por parte de los populares, a quienes acusó de negarle información durante la negociación de los presupuestos de 2025. Palmer también advirtió de la «presión brutal» hacia altos cargos de la órbita de Vox, como el anterior gerente de la Llar, Joan Caimari. Al final, éste fue cesado. En este punto, Bonet matizó que Caimari «fue cesado en consejo de administración convocado por su presidenta, que pertenece a Vox, en el cual los consejeros de Vox votaron a favor de esa salida».

La portavoz municipal quiso responder también al emplazamiento que había hecho la oposición socialista al alcalde para que se pronunciase sobre el futuro del acuerdo de gobierno. «En estos momentos, la ciudadanía no sabe si el pacto está roto, si siguen trabajando con normalidad, si el alcalde va a cesar más cargos de Vox, o qué sucederá tras los recientes desencuentros», dijo la portavoz del PSOE, Nati Francés. Bonet acusó a los socialistas de «intentar pescar en aguas revueltas».

«La ciudadanía de Calvià debe tener claro que el equipo de gobierno sigue trabajando con una total dedicación al municipio. Lo hacemos, como desde el primer día de legislatura, sin descanso, porque las divergencias que se puedan producir entre PP y Vox no afectan en nada a nuestro día a día. Tenemos mucho trabajo por delante y lo vamos a afrontar tal y como lo hemos hecho hasta ahora», subrayó la teniente de alcalde del PP.

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