El Consell de Mallorca y el ayuntamiento de Manacor están estudiando la posibilidad de transformar el uso del primer tramo de la carretera que sale de Porto Cristo en dirección a Son Servera y habilitarla como ronda urbana. Eso quiere decir que en el tramo que va desde la rotonda del instituto hasta el cruce de S’Illot-Cala Morlanda no estarían permitidos los adelantamientos y la velocidad se vería notablemente reducida.
En concreto, se trata de los primeros kilómetros de la carretera comarcal Ma-4023, tristemente famosa por ser uno de los principales puntos negros de la red viaria de Llevant y del municipio de Manacor en particular, donde en los últimos años se han producido diversos accidentes mortales por la salida de cruces con baja visibilidad y adelantamientos frustrados en curvas peligrosas.
De esta manera actuaría como continuación de la actual ronda de l’Oest porteña, con límites de velocidad y la imposibilidad de adelantamientos mientras dure el tramo urbano. Según explica el alcalde de Manacor, Miquel Oliver: «Le trasladamos la inquietud al nuevo conseller de Territorio Fernando Rubio para tratar de hacerla más segura. Además se trata de una zona donde además del IES Porto Cristo hay muchas propiedades privadas cercanas, varios restaurantes, el cruce de la depuradora o diversos establecimientos comerciales, lo que hace necesaria una actuación, por lo menos hasta el cruce de Cala Morlanda».
Y es ahí precisamente donde se tendría que construir una segunda rotonda de redistribución del tráfico, hacia Cala Millor-Son Servera o a la zona costera manacorina. Una actuación que, a su vez, vendría acompañada de la continuación del carril bici actual, para que acabara en Cala Morlanda, ya que actualmente es un camino de tierra entre la pared de la Ma-4025 y diversas propiedades privadas, hasta el punto que los últimos 300 metros llega incluso a ser inexistente.
Ronda de l’Oest
Otro de los puntos viales a resolver está precisamente en la ronda de l’Oest de Porto Cristo, tránsito natural de los coches que llegan a Manacor y se dirigen al norte. Durante los últimos veranos después de la pandemia la ronda sufre atascos en horas punta que llegan a ser kilométricos cuando se producen incidentes. En este sentido el alcalde Oliver apunta que técnicos del Ayuntamiento se pondrán a trabajar para encontrar una solución que aumente la fluidez sin que eso afecte a los aparcamientos marcados.
Por su parte, el partido socialista de Manacor presentó y sacó adelante una moción plenaria en la que pedía al Consell de Mallorca la construcción de una nueva ronda de circunvalación en el pueblo para contener el flujo de autobuses y vehículos de alquiler y darles una nueva salida en temporada alta. Algo con lo que no estuvo de acuerdo Més-Esquerra, pero sí sus socios porteños de AIPC, el PP y el propio PSOE.
Rotonda en la academia de Rafa Nadal
La zona de la Torre dels Enagistes pasa por ser, a día de hoy, una de las más colapsadas de Manacor. Cada día miles de coches llegan hasta allí, no tanto para ir al museo o al bar que hay en los alrededores, sino para ir al complejo deportivo municipal y sobre todo a la piscina y al gimnasio privado que Rafael Nadal tiene en su academia de tenis.
Dos instalaciones que en la práctica comparten aparcamiento de forma alegal, ya que según lo estipulado en el convenio firmado a tres bandas con el Consell y el Consistorio, la academia debería hacerse responsable de construir y habilitar un lugar particular donde sus clientes pudieran estacionar sin perjudicar a los demás.
Los problemas de aparcamiento hacen que cada día y en varias horas concretas de la mañana y la tarde, los conductores tengan que encontrar alternativas peligrosas para la seguridad y acaben dejando sus vehículos a un lado de la carretera comarcal de va a Son Forteza. De ahí que el alcalde de Manacor, Miquel Oliver; la directora de Hacienda y Presupuestos del Consell, Maria Antònia Sansó; y el conseller insular de Territorio y Movilidad, Fernando Rubio, se reunieran hace unas semanas para poner en común las soluciones.
Y es que en el Master Plan de la denominada Ley Nadal, por la que se le daba prioridad al tenista para acelerar la construcción de la academia, se estipulaba también la construcción de unos aparcamientos propios para sus clientes, una zona verde y una rotonda en la carretera a la altura de la entrada al complejo.
De hecho el Ayuntamiento ya tiene incorporado un remanente de más de 200.000 euros para tal propósito, además de lo que aporte el Consell de Mallorca, que tras la construcción de la rotonda cederá su gestión al consistorio manacorí.