794 años después, en una de las fiestas más importantes del municipio de Calvià y con una numerosa participación, se ha vuelto a conmemorar el desembarco de las tropas del Rei en Jaume en la cruz de Santa Ponça. Las tropas han llegado por mar desde el oeste, con un mar en calma que ha facilitado su desembarco. Las collas moras que ya los habían avistado, se han reunido en la costa, armados hasta los dientes, para impedir que las tropas cristianas consigan su objetivo, el de conquistar la isla de Mallorca.
Después de un recibimiento realmente hostil, amenazas y retos mutuos, ninguno de los dos bandos ha cedido y en el mismo punto del desembarco, la cruz de Santa Ponça, ha tenido lugar una importante confrontación entre las tropas sarracenas y las cristianas.
Después de haber medido sus fuerzas tanto las collas moras como las cristianas se han dirigido al Caló d’en Pallicer, lugar donde han tenido otro enfrentamiento, este más duro si cabe que el anterior. Después de este enfrentamiento las tropas de ambos bandos han desfilado por las principales calles de Santa Ponça, mostrando sus armas, sus trajes y sus coreografías.
Ha sido numeroso el público que ha seguido con atención este desfile que conmemora un momento que marcó notablemente la historia de Mallorca, que hasta la conquista del Rei en Jaume estaba poblada por musulmanes.
A la caída del sol sobre el horizonte de la playa de Santa Ponça, las tropas de ambos bandos se han vuelto a enfrentar, sobre la arena de la misma playa. En esta ocasión, además de la confrontación de las tropas entre sí, se han enfrentado el Rei en Jaume (Jaume Nadal), con el rey moro Abu Yahya (Esther Carigüela), batalla en la cual el joven Rei en Jaume ha abatido a Abu Yahya asegurándose que esta haya sido la última puesta de sol que ha visto el rey moro y permitiendo así, que a partir de este día, la historia de Mallorca marque un nuevo e inevitable rumbo.