Después de una temporada como la de 2022 que se movió en parámetros razonables en Magaluf (Calvià), el sector turístico confía en apuntalar esa tendencia con las herramientas que proporciona el decreto autonómico contra los excesos, que empezó a aplicarse de forma efectiva el año pasado tras el paréntesis obligado por la pandemia.
En la antesala del verano y con las vacaciones de Semana Santa como punto de partida, asociaciones como la de los comerciantes turísticos de Acotur se han puesto en guardia después de constatar que están proliferando en redes sociales anuncios de actividades prohibidas y que remiten a los años de los excesos de Magaluf. Unas redes que cubren el papel que tradicionalmente venían desempeñando los clásicos tiqueteros o relaciones públicas.
En este sentido, el presidente de Acotur, Pepe Tirado, informa de que ya ha empezado la publicidad de lo que en inglés se conoce como pub crawling, que son las rutas etílicas, esas excursiones organizadas que consisten en que grupos de turistas van de bar en bar consumiendo alcohol.
Y, de la misma forma, se están difundiendo posts animando a participar en party boats (fiestas en barcos). En la web, ya se pueden rastrear ofertas que, por un importe de algo más de 100 euros, ofrecen un pack completo de marcha este año en Magaluf, incluidas excursiones en barco, fiestas en la piscina, fiestas de la espuma y salidas nocturnas.
Desde esta asociación se reclama la convocatoria urgente del foro municipal de turismo, que agrupa a todo el sector junto con autoridades municipales y fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, a fin de empezar a planificar el verano.
«La temporada empieza la semana que viene y tenemos que saber y tomar posiciones en cuanto a la planificación», considera Tirado, quien pide la activación del decreto de excesos que el año pasado ya reveló su utilidad.
30 expedientes
En 2022, el ayuntamiento de Calvià tramitó una treintena de expedientes sancionadores en Magaluf gracias a la herramienta que le proporciona la mencionada normativa autonómica.
De estos 30 expedientes, 10 fueron interpuestos por infracciones muy graves, que se castigan con multas de 60.000 a 600.000 euros, por vender alcohol fuera del horario permitido y por «cosificación de la mujer». Las sanciones llevaron aparejadas en algunos casos el cierre de la actividad.
El resto de expedientes abiertos en la pasada temporada alta en Magaluf se tramitaron por incentivar el consumo masivo de alcohol a través de ofertas de 2x1 o happy hour, y por organizar party boats.
De forma paralela, desde el Consell de Mallorca se efectuaron 196 inspecciones en Calvià. En este municipio, 90 inspecciones se realizaron en viviendas turísticas; 52, en hoteles; 20, en establecimientos de restauración y entretenimiento; 15 en hoteles-apartamentos; 11 en apartamentos turísticos y también en una agencia de viajes y en una central de reservas. Esos controles posibilitaron la detección de 59 infracciones.