Después de meses sin prácticamente lluvias, las principales fuentes de Sóller muestran ya síntomas de agotamiento que se han traducido en una drástica reducción del caudal que aportan. La situación está generando preocupación en el Sindicato de Riegos, que ha informado que en las zonas de cultivo de la parte baja del valle el agua ya no llega debido a la falta de caudal suficiente.
Por ahora, las dos fuentes que aguantan el golpe son las de s’Ullet y Na Lladonera. Por el contrario, la fuente de s’Olla y Na Gireta prácticamente han dejado de abastecer tanto a los regantes como a la red de abastecimiento de agua potable de Sóller, según ha explicado el presidente del sindicato, Josep Lluís Forteza, quien ha señalado que estos dos acuíferos prácticamente ya no aportan caudal. El responsable de esta institución ha apuntado que «prácticamente desde noviembre que no llueve», una circunstancia que «ha provocado que la mayor parte de los manantiales del valle hayan registrado una disminución importante de su caudal».
Para el presidente de esta comunidad de regantes, la situación genera más preocupación en la zona de l’Horta «donde ya no llega el agua de las fuentes». Se da la circunstancia de que este año tampoco lo hacen los 80 metros cúbicos por hora que aportaba el flujo procedente de la estación depuradora, ya que el convenio con Medio Ambiente por el uso de agua regenerada caducó en 2021 y no ha sido renovado. El sindicato teme que, si la situación de sequía persiste, los regantes se quedarán sin agua para regar a los huertos de naranjos en poco tiempo.
