Sorpresa y vuelco mayúsculo en las parroquias de Campanet, Búger y Moscari. Su primer responsable, el párroco Joan Femenia ha decidido prescindir del sacerdocio por causas sentimentales y, en consecuencia, deja de estar al frente de estas tres parroquias. Femenia era uno de los curas más noveles del presbiterio mallorquín. Considerado, por edad, de vocación madura, en diciembre cumplió cinco años como sacerdote. Su renuncia ha causado el consiguiente impacto entre la feligresía y trastoca el organigrama de la unidad pastoral a la que estaba destinado como el de cargos diocesanos. Además, Joan Femenia también ha ejercido como sacerdote hasta ahora del cementerio de Palma.

El sábado pasado, tras la misa, comunicó en privado a algunos miembros del Consell Parroquial de Pastoral de Campanet su voluntad de colgar los hábitos porque se había «enamorado» de una vecina de sa Pobla. El domingo por la mañana también informó de su decisión en Moscari pero fue tras la misa del domingo de las 20 horas cuando el rector puso al tanto a los feligreses de Búger de su decisión.

Así, una vez concluida la misa, pidió a los presentes que se quedaran un momento y tras desprenderse de los ornamentos en la sacristía, volvió a salir para comunicar la inesperada novedad. En la iglesia estaba la nueva pareja del hasta ahora rector acompañada de dos amigas. Se produjeron reacciones emotivas entre los feligreses.

Así, la noticia de que el párroco optaba por otro modo de vida ha causado bastante sorpresa entre los vecinos de estos municipios que, si bien han valorado la transparencia y valentía de comunicarla, también ha generado preocupación entre los feligreses ante la incertidumbre de saber qué ocurrirá tras la marcha del rector que llegó hace dos años y medio a las parroquias de estos municipios del Raiguer.

Al Obispo

El propio Joan Femenia ha puesto en conocimiento del obispo Sebastià Taltavull su decisión de pasar a la vida civil, han confirmado fuentes del Obispado de Mallorca. Ahora será el vicario general de la diócesis y párroco de Sencelles, Costitx y Biniali, Pep Adrover, el encargado provisional de estas parroquias mientras el obispo y su equipo buscan una solución de mayor estabilidad y continuidad nombrando a un nuevo rector. Esta nueva baja incide en la precariedad de disponibilidad sacerdotal que afecta a la diócesis de Mallorca. A la escasez de vocaciones y al envejecimiento se suma el goteo de renuncias que se van produciendo por diversos motivos, muchas veces sentimentales, que chocan con la imposición del celibato a las personas consagradas.

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Joan Femenia nació en Palma en 1980. Tras cursar la carrera de Filosofía y Letras empezó los estudios eclesiásticos. Fue ordenado diácono en diciembre de 2016 en Binissalem mientras que en julio del año siguiente, en la Seu, fue ordenado presbítero y nombrado vicario de Binissalem y Consell. Al año siguiente dejó las parroquias de la unidad de Santa Maria, Consell y Binissalem para dedicarse a la pastoral de la salud mientras que en 2019 tomó las riendas de las parroquias de Búger, Campanet y Moscari.