Junts Avançam, principal partido de la oposición en el ayuntamiento de Pollença, ha remitido sendas instancias al Ayuntamiento y a la dirección insular de Patrimonio del Consell para reclamar la paralización de las obras de empedrado iniciadas por el Consistorio en la calle del Càrritx con el objetivo de realizar catas arqueológicas, ya que la zona donde se ejecutan las obras está ubicada a poca distancia de la antigua pescadería, donde hace unos tres años aparecieron los restos de una necrópolis islámica de los siglos XII y XIII mientras se llevaba a cabo la reforma del edificio.

Junts sostiene que el Ayuntamiento «acordó no hacer un control arqueológico en el proyecto de empedrado de calles, a pesar de las alegaciones y recursos interpuestos» por este partido. Por este motivo, ha instado al Consell a parar las obras y ordenar la realización de las catas arqueológicas y el preceptivo control posterior «para asegurar que, si hay hallazgos, puedan recuperarse».

No obstante, el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre, ha asegurado este miércoles que el proyecto ha contado con la supervisión de un arqueólogo porque «así lo ordenaba el proyecto». Según Cifre, el martes un técnico contratado por el Ayuntamiento realizó una cata arqueológica en la zona que debía ser objeto de obras y autorizó el proyecto municipal porque no se hallaron restos históricos. «El arqueólogo explicó que esta calle ya había sido excavada con anterioridad y que los hallazgos encontrados en la pescadería estaban a diferente nivel que la calle», añade Cifre.