Jarro de agua fría a la recuperación en Platges de Muro, concretamente, en la zona de ses Casetes des Capellans donde Demarcación de Costas ha denegado el permiso para ocupar las terrazas con sillas y mesas a pie de playa a tres populares chiringuitos: Can Gavella, Ponderosa Beach y Olimpia Opa & Oma. Quedan dos semanas para las vacaciones de Semana Santa, fecha en la que los restaurantes tenían previsto abrir, por ello, el malestar y la preocupación entre restauradores, trabajadores y vecinos es máxima. 

Los restauradores afectados Jaume Perelló de Can Gavella, Carlos Ramis de la Ponderosa Beach y Francis Lora de Olimpia Opa & Oma no dudan en poner cifras a esta denegación del permiso por parte de Costas: «Se cargan 90 puestos de trabajo de golpe». Detallan que cada uno de los establecimientos cuenta con una veintena de trabajadores fijos discontinuos mientras que en temporada alta llegan a la treintena de empleados en cada restaurante. «Están maniatados», confiesan. «No poder montar la terraza, me supone no poder dar trabajo a estos 20 fijos discontinuos. Como máximo el 21 de mayo debo dar de alta a los fijos discontinuos y, si no, debo despedirles. Su despido suma 82.000 euros pero no los quiero despedir porque estoy muy contento con ellos, además hay gente que lleva 20 años trabajando en Can Gavella, que es un restaurante familiar. Soy la tercera generación», admite Perelló. Y es que los tres restaurantes llevan ofreciendo un servicio desde los años 60. «Somos la oferta complementaria de calidad de la zona, muy populares entre el público local, y se la han cargado de golpe», puntualizan.

Desde Delegación de Gobierno han asegurado que Demarcación de Costas en Balears está a la espera de que la dirección de Costas en Madrid se pronuncie, por ello, aseguran que está en trámite y no hay nada en firme.

Todo ello se remonta a la temporada pasada. Los restauradores explican que cada cuatro años piden una autorización a Costas para montar las terrazas. El año pasado fue denegada por un tema de distancias entre restaurantes, por no cumplir la OCAMAT 2013. «Las instalaciones son las mismas», puntualizan. «Recurrimos y en octubre nos contestaron que no nos autorizaban a instalar mesas y sillas en esta zona hasta que estuviera aprobado el deslinde», recuerdan. «Que no nos den permisos hasta que se apruebe el deslinde implica que pueden pasar años y más años», lamenta Perelló. "El último duró diez años y acabó caducando", recuerdan los restauradores, que en octubre presentaron un recurso de alzada. Ante el silencio, solicitaron un requerimiento expreso. «La semana pasada nos contestaron que nos responderán al recurso que presentamos en octubre», detallan.

De momento y con la temporada a la vuelta de la esquina, los restauradores de Capellans se ven obligados a solo abrir sus interiores pero «la belleza son las terrazas». «Abrir tendremos que abrir pero no nos quedará otro remedio que solo ofertar el interior y recurrir a lo que nunca hemos querido hacer como es el take away. Los restauradores critican que otros años les han autorizado con las mismas normas y lamentan que los quieren quitar de en medio. «La gente está preocupada», sentencian.

El alcalde Miquel Porquer: «También somos parte afectada» 

El alcalde de Muro, Miquel Porquer (El Pi) ha lamentado la denegación del permiso por parte de Costas a los negocios de Capellans y aseguró que el Ayuntamiento «también es parte afectada». «Siempre defenderemos a los chiringuitos y a la veintena de casetas afectadas», ha añadido el primer edil, que explica que la institución municipal ha presentado un recurso contra la denegación de la autorización, si bien admite que «es muy difícil» que este año pueda resolverse la problemática. Además, el Ayuntamiento está recabando informes para recurrir también en contra del deslinde de Costas.