El conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, y el alcalde de Inca, Virgilio Moreno, han firmado este jueves el convenio de colaboración que permitirá construir una nueva parada de tren entre los campos de fútbol del Constància y el Sallista que facilitará también el acceso de los usuarios al hospital comarcal, ubicado a poca distancia del futuro apeadero. 

El proyecto de la nueva parada, adjudicado a la empresa SMART2 por 30.500 euros, tiene un presupuesto de 3,1 millones de euros y está previsto que la licitación se lleve a cabo durante el próximo mes de marzo. Las obras tendrán una duración de siete meses, por lo que si se cumplen los plazos estipulados el proyecto será una realidad el próximo otoño.

El apeadero estará ubicado al lado de la actual parada de autobuses Inca-Llevant, que conecta la ciudad con numerosos municipios y núcleos costeros de la zona a través de seis líneas de transporte público por carretera.

El proyecto presentado hoy está configurado como una «propuesta arquitectónica y urbana» que pretende facilitar el uso del transporte público y también «es coherente con la estrategia de reconversión territorial impulsada por el planeamiento urbanístico en la fachada de Inca», señala la conselleria, que añade que el diseño de la futura parada de tren se ha elaborado «con criterios de accesibilidad, funcionalidad, seguridad y eficiencia».

El apeadero estará ubicado en la citada zona deportiva y contará con dos andenes de 85 metros de longitud y cuatro de amplitud, cubiertos con una marquesina de protección. También dispondrá de un paso inferior entre los andenes con una longitud de 9,30 metros y adaptado a los criterios de accesibilidad vigentes.

La nueva infraestructura incluirá dos accesos para peatones, uno para los usuarios del hospital comarcal y otro secundario para los peatones que accedan al apeadero desde la carretera Palma-Alcúdia ubicada a poca distancia. Asimismo, el proyecto contempla una zona de aparcamiento con capacidad para 25 vehículos en dos espacios diferentes.

Por otra parte, cabe recordar que de forma paralela se ejecutará el reivindicado proyecto de un eje cívico entre la ciudad de Inca y el hospital que permitirá acceder a pie con seguridad al centro sanitario. Esta actuación, que conectará con la nueva parada de tren, es competencia del Consell, que ya ha adjudicado las obras y solo está pendiente de diversos «reajustes», según el alcalde.

En este sentido, Moreno ha destacado la importancia de ambos proyectos para mejorar la conectividad de la ciudad con el hospital, mientras que el conseller Marí ha lamentado los «retrasos» que ha sufrido el apeadero debido a «diversas modificaciones sobre el proyecto técnico». El acto de firma también ha contado con la presencia del director general de Movilidad y Transporte, Jaume Mateu, y el gerente de SFM, Mateu Capellà.