El grupo ecologista GOB ha criticado que la Comisión Balear de Medio Ambiente (CBMA) haya emitido un informe favorable al proyecto de la planta de hidrógeno de Lloseta "sin todas las garantías ambientales por lo que se refiere al tratamiento del agua de rechazo de la planta".

El máximo órgano ambiental, amparándose en la declaración de proyecto industrial estratégico, "se exime de su deber de garantizar el cumplimiento de los principios de precaución y de prevención", ha denunciado el GOB en una nota.

Según la entidad verde, no puede darse el visto bueno a una actividad "de esta envergadura" por medio de una solución transitoria y sin resolver lo que se refiere a las aguas de desecho de la planta de hidrógeno y las procedentes del separador de hidrocarburos.

El GOB critica que la CBMA no cuestione los "impactos inciertos del hidrógeno", del proyecto "Power to green hydrogen" del acuerdo para reindustrializar Lloseta entre el Govern, Enagás, Acciona, Cemex, Redexis y el Instituto para la Diversificación y Ahorro Energético IDAE.

Rechaza que el máximo órgano ambiental de las islas no exija "todas las garantías ambientales antes de darle el visto bueno".

El GOB, basándose en argumentos de Ecologistas en Acción y el Observatorio de la Deuda en la Globalización (ODG), alerta de los riesgos e incertidumbres que plantean las propuestas lanzadas por administraciones y empresas en relación con el "hidrógeno verde".

Advierten de que el hidrógeno no es una fuente de energía primaria, sino un vector energético que permite almacenar energía para ser utilizada posteriormente, pero que necesita un aporte inicial de energía primaria para obtenerlo en estado puro.

Sus propiedades físico-químicas serán determinantes para establecer valoraciones sobre el papel que puede jugar, ya que dificultan su transporte y almacenamiento. Hoy en día la eficiencia en el proceso de obtención del hidrógeno varía entre el 20 % y el 40 %, según el sector y la tecnología de aplicación, lo que supone "unas pérdidas muy importantes", según el GOB.

Señalan además al elevado coste de la producción de este gas y la necesidad de comprimirlo a altas presiones.

Sobre el proyecto de Lloseta, el informe de la CBMA dice sobre el suministro de agua que el promotor ha solicitado la tramitación de aprovechamiento del pozo Els Mitjans para usos industrial, de consumo humano y extinción de incendios.

Y sobre las aguas de desecho de la planta de hidrógeno y las procedentes del separador de hidrocarburos, dice que deben ser reutilizadas o bien solicitar autorización a la autoridad hidráulica para verterlas en el torrente. El vertido a la red de alcantarillado municipal que propone el proyecto presentado, "no es recomendable" porque supondría una sobrecarga hidráulica del sistema.

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Pero al ser un proyecto declarado como industrial estratégico, la autorización ambiental integrada podrá prever el vertido al alcantarillado como establezca la Dirección General de Recursos Hídricos, de forma transitoria, por el tiempo "imprescindible para la tramitación de los proyectos y permisos para la reutilización o, en su defecto, para el vertido al torrente".