Sant Llorenç dispondrá de una nueva residencia para personas mayores, que podría estar operativa en un plazo de unos cuatro años. Así lo anunciaron ayer la presidenta del Govern, Francina Armengol y la consellera de Asuntos Sociales, Fina Santiago, que junto con el alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigrós, visitaron ayer el solar que ha cedido la administración municipal para su construcción. 

En el solar cedido, de siete mil metros de superficie, inicialmente se construirá un edificio con capacidad para sesenta plazas que se repartirán en módulos de veinte. Las plazas se podrán ampliar en un futuro, hasta un total de 120, y pasarán a formar parte de la red pública de atención a la dependencia de Balears, durante un plazo de treinta años como mínimo. 

En su construcción se destinarán 5,7 millones de euros, que sufragarán las sesenta plazas iniciales, financiadas a través de fondos europeos. Por su parte, el ayuntamiento de Sant Llorenç se hará cargo de la adecuación urbanística de los terrenos. 

Armengol agradeció al consistorio de Sant Llorenç su compromiso «con una política clave, como es la atención a las personas mayores de una manera mucho más integral y próxima». 

Asimismo, la presidenta valoró que esta infraestructura se financiará con fondos europeos porque «es importante vincular la política social con la reactivación económica», y recordó que el Govern balear ha pasado más de 460 plazas de la privada a la concertación.