El pleno del Parlament aprobó ayer una moción presentada por el PP relativa a la pesca de arrastre, en la que pide al Gobierno que paralice la aplicación del plan de pesca en el Mediterráneo hasta que se hagan estudios necesarios que demuestren la existencia de sobreexplotación pesquera por parte de la flota de Balears. La iniciativa, que fue presentada y defendida por la diputada ‘popular’ Virginia Marí, fue aprobada por unanimidad en cinco puntos.

El sexto, en el que se rechazaba la forma de actuar del comisario de Pesca de la Unión Europea, Virginijus Sinkevicius, por su insensibilidad y sus comentarios despectivos a la pesca de arrastre del Mediterráneo, fue aprobado por 25 votos a favor, siete en contra y 21 abstenciones.

Además, el PP aceptó las enmiendas presentadas en los puntos 2, 3 y 5 por El Pi y Unidas Podemos. En la defensa de la moción, la diputada Marí indicó que el reglamento europeo aplicará a Balears una «reducción adicional». Por ello, aseguró que «no se puede esperar porque si no, no quedará flota en Balears». «De ahí que hicieran la huelga», manifestó.

Marí afirmó que es la pesca de arrastre la que mantiene las cofradías de pescadores en Balears. Además, comentó que «en ningún momento se ha tenido la flota pesquera» de las islas: «Se nos compara con otras comunidades o con países como Francia e Italia, que tienen más». «Si esto sigue así, nos quedaremos sin producto local», subrayó, para después comunicar que el PP siempre «estará apoyando a los pescadores, porque ellos cumplen todo lo que les piden».

A continuación, la diputada de El PIiMaria Antònia Sureda se remitió a la comparecencia de la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha, la semana pasada en la Comisión de Economía: «No estaba informada de algunas cuestiones».