Campos ha estrenado esta semana el sistema de recogida selectiva puerta a puerta. Su alcaldesa Francisca Porquer se mostró muy satisfecha del nuevo servicio y, aunque admitió que «todos los cambios cuestan», entiende perfectamente «las dudas» que puedan tener los residentes. Por ello, invita a pasar por el Ayuntamiento para esclarecerlas. De hecho, educadoras ambientales llevan dos meses explicando a los residentes el cambio de sistema.

Se trata de un cambio para «mejorar nuestro pueblo» y tener un «Campos más limpio y ecológico». Y es que la primera edil recuerda que el Consistorio destina 800.000 euros anuales en la incineración de residuos y aprovecha para reclamar al Consell una rebaja en la tasa de incineración. «Si entre todos logramos que este sistema funcione, en un futuro se podrán bajar las tarifas de basuras en el núcleo urbano», avanza. Y es que en el caso de foravila, se han sustituido los contenedores por tres áreas de aportación. En este caso, los residentes fuera del núcleo urbano sí verán disminuida su tarifa en el recibo. Y es que su tasa de recogida bajará un 95% y solo pagarán la parte correspondiente al tratamiento de residuos. En el caso del núcleo urbano, espera que esta rebaja sea una realidad cuando disminuyan los residuos que acaban en la incineradora.

En sa Ràpita y ses Covetes se implantará el nuevos sistema en 2023.