Para solucionar el gran problema de la mayoría de núcleos de Santanyí, la fundación Natura Parc ha tendido trampas a las palomos en los tejados de los edificios con resultados muy satisfactorios. La alcaldesa Maria Pons explicaba que «hemos recibido un contingente de jaulas para atrapar las aves por parte de Natura Parc, cuyos técnicos retiran estos animales». Los excrementos son tan corrosivos que provocan la oxidación de todos los objetos con que contactan.