La asociación de usuarios del tren de Mallorca ha registrado la petición de una reunión con el nuevo conseller de Movilidad y Vivienda, Josep Marí Ribas, con el objetivo de trasladarle las principales peticiones de los viajeros habituales del ferrocarril, entre las que destaca la propuesta de «abaratar significativamente» el precio de los billetes sencillos del nuevo sistema tarifario, muy criticado por los usuarios del tren y el transporte por carretera al considerar que supone un aumento encubierto de precios.

La asociación reclama también a la Conselleria que aumente la capacidad, las frecuencias y la eficiencia del transporte ferroviario para «incentivar» el trasvase de usuarios de coche privado al tren. Además, también proponen reducir el precio base de todos los perfiles de la tarjeta monedero y alargar el plazo de caducidad de los puntos de bonificación a un año, así como habilitar a personal para destinar al control de billetes para que actúe como punto de información y pueda cargar las tarjetas monedero.

Asimismo, exigen la supresión de la penalización de 50 céntimos en caso de no validación de los trayectos, entre otras demandas como la implantación de abonos de 10 y 20 saltos sin fecha de caducidad que puedan ser adquiridos en todas las islas de forma fácil en oficinas de información turística, taquillas y máquinas expendedoras del TIB.

El colectivo que representa a los usuarios propone también convenios de colaboración con todos los ayuntamientos para "fomentar y favorecer el transporte público con la venta de abonos del TIB". Otra demanda de la asociación es la modificación del sistema de saltos para "eliminar el agravio comparativo que supone que un trayecto entre dos paradas contiguas implique un salto, mientras que otro trayecto entre varias paradas separadas implique cero saltos". A modo de ejemplo, citan el caso del trayecto entre Es Caülls y Palma, cuyas estaciones están separadas por nueve paradas pero el trayeto implica cero saltos, mientras que desde Es Caülls a Santa Maria, cuyas paradas son seguidas, el sistema contabiliza un salto.

Por último, instan a renovar de forma gratuita la tarjeta intermodal en los casos de deterioro o pérdida y la recuperación automática de todo el remanente existente. La ampliación a los 16 años de la edad para que la tarjeta siga gratuita, ya que esta "es la edad mínima para poder trabajar y tener un sueldo", y premiar de forma gradual la fidelidad de los usuarios son otras demandas del colectivo.