Ya se han iniciado las obras para la supresión del paso a nivel de la Calle Farinera de Es Pont d’Inca, cuyo proyecto fue presentado el pasado mes de agosto y adjudicado a inicios del mes de diciembre a la empresa Comsa S.A.U. por un importe de 1,6 millones de euros. El presupuesto efectuado por el Govern ascendía a 1,9 millones, por lo que ha habido una rebaja de unos 335.000 euros respecto a la previsión inicial.

Las obras que ya se han iniciado, con un plazo de ejecución de ocho meses, consisten en la supresión del paso a nivel de la calle Farinera, por lo que el tráfico rodado quedará eliminado y únicamente se permitirá el acceso peatonal por debajo de la vía férrea, construyéndose una escalera y una rampa para las personas con movilidad reducida y que vayan acompañadas de bebés con sus cochecitos.

El futuro paso peatonal por debajo de las vías, que tendrá una anchura de 4,80 metros y 11 metros de longitud, estará debidamente iluminado y se instalarán dos ascensores para facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida. Uno de los ascensores, el situado en la parte de la calle Antoni Maura, también tendrá en un futuro acceso desde el interior del edificio de sa Garrovera, adquirido por el consistorio de Marratxí.

Para solventar el tráfico rodado y que los vecinos de Sa Cabana no tengan que dar el actual rodeo para acceder a la urbanización de Es Pont d’Inca Nou, el Govern unirá ambas urbanizaciones mediante un puente que superará el torrente de Coanegra, conectando las calles Verderol de Sa Cabana y Massanella de Es Pont d’Inca Nou. El puente tendrá una longitud de 30 metros y contará con un carril bici para facilitar el acceso de los alumnos al colegio Blanquerna situado en Es Pont d’Inca Nou, la ubicación del cual ya ha sido vallada por la empresa adjudicataria de las obras.

Una vez finalizadas las obras, el mantenimiento tanto de la plaza resultante del cierre del paso a nivel ferroviario de la calle Farinera como de este nuevo puente correrá a cargo del ayuntamiento de Marratxí.