Numerosas familias de Pollença se manifestaron ayer en coche para exigir a Demarcación de Costas que los parques infantiles se queden en las playas del Port. Una caravana de vehículos, hasta 200 según la organización y 50 según la Guardia Civil, circularon por la primera línea desde Llenaire.
Con pancartas en las que reivindicaban los parques infantiles en las playas de Tamarells, Albercuitx y Llenaire, pero también las pasarelas de madera para las sillas de ruedas, los merenderos y la instalación de aseos públicos, los coches iniciaron su marcha sobre las 11.30 horas.
La manifestación había sido convocada por un grupo de padres y madres que consideran «incomprensible» que Costas obligue al ayuntamiento de Pollença a desmantelar los parques infantiles «cuando en estos momentos de pandemia es mucho mejor que los niños estén al aire libre», explicó una de las convocantes. Esta madre también calificó de «injusto» que las pasarelas de madera que utilizan las personas con movilidad reducida y los carritos de bebé se tengan que quitar.
La protesta fue autorizada hace tan solo unos días, por lo que la participación conseguida fue valorada como «muy positiva» por la organización.
Tal como ya publicó hace días este diario, a pesar de la demanda del ayuntamiento de Pollença para mantener los parques infantiles y otros elementos en las playas urbanas del municipio, la Demarcación territorial de Costas todavía no ha emitido una resolución que obligue a su retirada y el proceso sigue abierto y pendiente de informes y alegaciones.
