La instalación fotovoltaica que se ha instalado en la estación depuradora de Alaró supondrá un ahorro anual de unos 10.000 euros, según ha destacado este jueves el vicepresidente y conseller de Transición Energética y Sectores Productivos, Juan Pedro Yllanes, durante una visita a la nueva estación junto al conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir; el alcalde de Alaró, Llorenç Perelló; y el director general de Endesa en Balears, Martí Ribas.

La instalación está formada por 240 paneles que ocupan una superficie de 852 metros cuadrados y generarán una producción eléctrica anual de 118.021 Kwh.

El proyecto ha supuesto una inversión de 53.820 euros y está incluido en el contrato de suministro de energía eléctrica para los edificios y las instalaciones de la administración autonómica, del cual Endesa es la adjudicataria. Yllanes se ha referido a este contrato como una “herramienta fundamental para implantar definitivamente la eficiencia energética en todos los edificios públicos y para potencar la penetración de las energías renovables”.

Además de los más de 10.000 euros anuales que la instalación supondrá para la administración, se calcula que se ahorrarán 101.819 kilos de emisiones de CO2, “lo que equivale a 10.000 viajes en coche de Palma a Cala Rajada”, según apunta el ejecutivo.

Por su parte, el conseller Mir ha valorado de forma muy positiva que la administración pública “vaya avanzando en la transición energética, uno de los puntales para poder afrontar con garantías la emergencia climática”. Martí Ribas, de Endesa, ha apuntado que la instalación de placas fotovoltaicas en la depuradora de Alaró constituye “un buen ejemplo de que las energías renovables son una solución para disminuir la dependencia de las energías fósiles”.