La Policía Local de Llucmajor ha denunciado a un individuo que vive en una cueva natural de Son Verí, en primera línea de mar, por estar construyendo un cercamiento sin ningún tipo de licencia. La actividad constructora de este hombre había sido motivo de quejas vecinales en los últimos días.

El Ayuntamiento informó a este diario de que la intervención de los agentes se produjo el pasado jueves, al constatar que el hombre estaba erigiendo una pared sin permiso alguno. Los policías le denunciaron, pero el hombre se negó a firmar la denuncia, según señalaron fuentes municipales.

La actuación del morador de esta cueva natural había provocado las quejas de vecinos de la zona, que consideraban «increíble» que alguien pudiese erigir «impunemente» un muro en primera línea de costa, cercando una cavidad que, «para más inri», está okupada desde hace tiempo. En este sentido, no faltaron voces vecinales ironizando con lo que pasaría si el dueño de una casa legalizada procediese a realizar una modificación de su vivienda sin los preceptivos permisos. «Las autoridades vendrían y se lo tirarían todo abajo», continuaron su argumento. Esos residentes advirtieron también de la peligrosidad que supone el hecho de que el morador de esta cueva natural tenga bombonas de gas.

Demarcación de Costas

Ante las quejas por la permisividad institucional hacia la okupación de este espacio costero, el Consistorio llucmajorer respondió que, al tratarse de un lugar en primera línea de mar, las competencias para desalojarlo corresponderían a Demarcación de Costas.

Esta cueva natural lleva habitada al menos desde 2019. Tal y como informó este diario, un ciudadano extranjero habilitó una vivienda en la cavidad, que cuenta con muebles, un generador de electricidad y hasta una puerta con candado.

A unos 50 metros de distancia del lugar, discurre un paseo peatonal y un poco más lejos hay varias viviendas de lujo.