Un pleno extraordinario aprobó este viernes los presupuestos de 2021 para Calvià, que, en opinión de la mayoría progresista gobernante, serán una palanca para la «recuperación económica» y el impulso a las ayudas sociales, pero que la oposición ve «irreales» y carentes de medidas de calado como una rebaja fiscal.
Las cuentas municipales de 2021, que ascienden a 98,4 millones de euros con el compromiso anunciado de que crecerá al incorporar en abril fondos del remanente de tesorería, fueron ratificadas por los ediles socialistas y de Podem-Més, mientras que PP y Vox se opusieron. Las dos regidoras de Cs se abstuvieron.
El teniente de alcalde de Economía, Marcos Pecos (PSOE), explicó cómo se había tenido que reajustar el presupuesto ante la caída de la recaudación fiscal, pero remarcó que, con la incorporación de esos fondos de la ‘hucha’ municipal tras la flexibilización de la Ley Montoro, se podrá hacer frente a los «gastos extraordinarios» de la crisis.
En este sentido, destacó partidas como los 590.000 euros destinados a ayudas al alquiler (con la posibilidad de ampliarlas si hay más demanda) o el incremento hasta 1,2 millones en ayudas para necesidades básicas, a lo que añadió los fondos para el plan de un centenar de VPO en Santa Ponça, entre otras iniciativas.
"La gestión presupuestaria de los últimos seis años ha sido excelente. Hemos conseguido una reducción histórica de deuda: era de 55 millones en 2015 y cuando acabe este año estará en 3,6 millones (apenas el 3% del presupuesto)"
La oposición atacó por el flanco impositivo y del organigrama de asesores. Las portavoces de PP, Cs y Vox, Luisa Jiménez, Gaël Thyus y Esperanza Catalá, respectivamente, recriminaron a la coalición gobernante que no baje los impuestos ni reduzca el número de altos cargos.
«Es un presupuesto irreal que tendrá que sufrir infinidad de cambios par adaptarse a un 2021 muy duro», manifestó Thyus, quien justificó su abstención por la inclusión de algunas propuestas de Cs, como la bonificación del IBI para las viviendas que instalen energías renovables.
"Déjese de maquillajes. Cuando la caída de la actividad será superior al 40% en Balears, en Calvià será mayor aún. Sin embargo, ustedes creen que los vecinos van a poder hacer frente al pago de impuestos"
Jiménez, por su parte, lamentó que el gobierno local prevea unos ingresos que son un «brindis al sol». «De cada 100 euros que prevén en ingresos no podrán ingresar ni 80», argumentó la portavoz del PP, quien cuestionó el «paupérrimo de inversiones». «En la mayor crisis de la historia, el gobierno no se adapta a la situación. No puede ser insensible y mantener el gasto en personal de confianza», afirmó. Mientras, en opinión de Catalá, el presupuesto no responde a la «unica prioridad actual: la reactivación económica real».
En el turno de réplica, el alcalde Alfonso Rodríguez Badal ironizó con que la oposición hable de «bajar impuestos, subir ayudas y subir la inversión». «¿Alguna vez han cuadrado un presupuesto?», les preguntó, retóricamente. Rodríguez Badal enfatizó que la «excelente gestión presupuestaria de los últimos seis años», en que, dijo, la deuda ha pasado de 55 millones a 3,6 a finales de este año, permite afrontar con solvencia la actual crisis.
