Los bares y restaurantes de Fornalutx cerrarán sus puertas a partir de las 17 horas de la tarde como una medida para hacer frente a los casos de coronavirus que se han registrado en el municipio en los últimos días. La medida ha sido consensuada entre el ayuntamiento que preside Francesc Marroig y los dueños de los establecimientos afectados.

Hasta hace una semana Fornalutx había sido uno de los pocos municipios de Mallorca y del conjunto del archipiélago que no había registrado casos de covid. Incluso en los peores momentos de la crisis sanitaria el municipio no registró contagios, algo que la semana pasada cambió tras detectarse un primer caso. Desde entonces la situación ha empeorado hasta el punto de que ya son siete los vecinos del pueblo que deben guardar cuarentena tras haber dado positivo en los test de detección del virus.

Ante esta situación, el alcalde Francesc Marroig convocó a los dueños de los nueve bares y restaurantes que hay en el municipio con el fin de consensuar medidas para evitar la propagación de la enfermedad. El acuerdo al que han llegado consiste en avanzar la hora de cierre de los establecimientos a las 17 horas de la tarde. De este modo, durante la noche ningún bar o restaurante tendrá abierto por lo que no podrán convertirse en foco de transmisión del coronavirus.

La medida de cierre estará acompañada por ayudas que desplegará el Ayuntamiento que beneficiarán tanto a los establecimientos de restauración como al pequeño comercio del municipio. El Consistorio ha hecho un llamamiento a través de su tablón de anuncios para que los responsables del pequeño comercio de Fornalutx soliciten bonificaciones en las tasas de ocupación de la vía pública y recogida de basuras, entre otras. Pese a la alarma que se ha extendido en un municipio de apenas 700 habitantes, Fornalutx es uno de los municipios menos afectados por la pandemia, tal y como se desprende del último informe de Epidemiología.

Por otro lado, en el municipio vecino de Sóller el alcalde Carlos Simarro y la edil de Sanidad, Catalina Pomar, lanzaron ayer un llamamiento a la población reclamando que los sollerics sean más estrictos en el cumplimiento de las normas sanitarias para evitar contagios. En las dos últimas semanas se ha producido un rebrote con más de 50 nuevos casos activos, algo que no ha pasado desapercibido en el Ayuntamiento que, en boca del alcalde, afirmó que «o nos portamos bien, o nos confinan». Simarro y Pomar explicaron que ante la llegada del puente han llegado «rumores» de la celebración de fiestas ilegales en olivares del municipio.

Peligro de derrumbe

Por otra parte, el PP ha alertado del peligro de derrumbe de una de las paredes de la carretera de Fornalutx dirección Sóller. En este sentido, el PP pedirá al conseller insular de Infraestructuras, Iván Sevillano, en el pleno del jueves por la previsión de adecuación de la misma. «Es necesario actuar urgentemente», avisa el PP.