Más hectáreas protegidas. El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luís Planas, acompañado de la presidenta Francina Armengol, inauguró ayer la nueva reserva marina de interés pesquero de sa Dragonera, que añade otras 457 hectáreas protegidas a las 912 que forman la reserva del Freu. El ministro destacó que «las reservas marinas son todo un ejemplo de gestión que permiten conciliar la actividad pesquera tradicional y la conservación medioambiental».

Se trata de una reserva marina, de gestión compartida entre el Estado y el Govern, que nace para “apoyar la regeneración de los recursos pesqueros y el mantenimiento del buen estado ambiental de su hábitat». Se caracteriza por tener un perfil abrupto, de fondos rocosos, con multitud de arrecifes, cuevas submarinas y especies (incluidas aves marinas) que se encuentran en un excelente estado de salud apreciable a simple vista.

El área empezó a protegerse en 2016 por parte del Govern en lo que a sus aguas interiores se refiere, y un acuerdo con el Ministerio ha permitido ampliarla con aguas exteriores dependientes del Estado. Así, la reserva se establece ahora sobre tres zonas sobre las que se aplican distintos grados de protección. En la primera de ellas, de 82 hectáreas, solo se permiten actividades científicas. A continuación existe otra, de usos restringidos, en la que, además, se podrán llevar a cabo actividades de buceo y recreo de carácter didáctico. Por último, en la más exterior se permite la pesca profesional con artes de pesca tradicionales y en barcos adscritos a un censo específico de la reserva; en este caso, también se permite la pesca recreativa desde embarcación. Todo ello con el preceptivo permiso administrativo.

«Tenemos experiencia de que cuando ponemos mecanismos de protección y regulación obtenemos buenos resultados para todos. Las reservas funcionan. En dos años la población de peces se ha multiplicado por tres en la reserva del Freu», destacó Armengol, mientras que Planas añadió que «todo lo que hacemos es para asegurar el futuro de la pesca».

«Encaje insular específico» para los agricultores

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se ha comprometido a definir «un encaje insular específico» para responder a la necesidad de compensación de los costes de la insularidad en la aplicación de la Política Agraria Común (PAC) europea en España. Este «modelo específico balear» tendrá en cuenta los sobrecostes que la condición insular suponen para agricultores, ganaderos y productores alimentarios, y también las «características estructurales que hacen que el sector sea más frágil» en el archipiélago, como el pequeño tamaño de las explotaciones y la presión territorial de otras actividades económicas. Planas ha hecho estas declaraciones tras mantener este jueves una reunión en Palma con la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación de Balears, Mae de la Concha, para quien es «absolutamente vital» que la insularidad balear tenga una consideración específica en el reparto de los 47.724 millones de la PAC para España en el periodo 2021-2027. efe palma