La Junta Rectora del Consorci de la Serra de Tramuntana aprobó ayer por unanimidad el presupuesto de 2021, que se incrementa un 30%. En concreto, el presupuesto pasa de 1,4 millones euros gestionados en 2020 a 1,8 millones de euros para el año que viene. Se trata de una subida presupuestaria que implicará un aumento de las subvenciones. Unas ayudas que, según argumentó la consellera de Territorio, Maria Antònia Garcías, «contribuyen a mantener los elementos que hicieron que la Serra sea merecedora del reconocimiento de la UNESCO», como Patrimonio de la Humanidad. En el presupuesto de 2021 del consorcio, explicó Garcías, se incrementan las subvenciones a particulares destinadas a la recuperación agrícola y de elementos etnológicos. Si en 2020 disponían de una partida de 400.000 euros, el año que viene será de 670.000 euros.
En estas subvenciones, se incluyen 120.000 euros para ayudas dirigidas a particulares y empresas que se vieron afectadas por el cap de fibló del pasado 29 de agosto, que afectó sobre todo a Banyalbufar, Valldemossa y Esporles. Las cuentas del consorcio incluyen otra partida de 100.000 euros para acciones paisajísticas. «Estudiamos otra fórmula para abarcar desde una mayor transversalidad todo el territorio», declaró la consellera Garcías. Según informó el Consell, aumentan también las ayudas a las empresas agrarias, que pasan de 100.000 a 160.000 euros, al mismo tiempo que se incrementa en 50.000 euros la línea de gasto de las subvenciones para cubrir las demandas que han llegado al consorcio durante 2020.
