El ayuntamiento de Alaró empezará a sancionar a partir de este próximo fin de semana a los conductores que estacionen sus vehículos en la carretera de acceso al castillo y también en el camino de Solleric, un problema que, según explica el alcalde Llorenç Perelló (PP), se ha agravado en las últimas semanas como consecuencia de la pandemia sanitaria, que «ha dejado el espacio libre como única alternativa real de ocio» entre los ciudadanos.
El Consistorio ya ha procedido a instalar señales al principio de la carretera para informar de la prohibición de estacionar en los laterales del vial con el objetivo de «evitar problemas circulatorios y los consecuentes problemas de seguridad que comportan estos estacionamientos incorrectos». Y es que, según apunta el regidor, los coches aparcados en los laterales de esta vía «pueden provocar que los vehículos de emergencia como ambulancias, coches de protección civil, bomberos o Policía Local no puedan llegar hasta el final de la ruta en caso de precisar su actuación». Durante el pasado mes de octubre se produjeron diversas emergencias que necesitaron la participación de ambulancias, sucesos que podrían intensificarse debido a la mayor proliferación de personas en las áreas naturales.
Los ciudadanos que quieran subir hasta el castillo de Alaró deberán estacionar el coche en los aparcamientos habilitados tanto en Es Verger como en el Pla des Pouet, a partir del cual solo es posible continuar la ruta a pie hasta la histórica fortaleza.
El ayuntamiento de Alaró aplicará sanciones a los coches mal aparcados que oscilan entre los 80 y los 200 euros en función de la gravedad de la infracción. Los vehículos que estacionen sobre una curva o bien barren el paso a uno de los atajos existentes en la montaña serán multados con la cantidad más elevada.
Perelló explica que cada fin de semana se constata la presencia de una veintena de vehículos mal estacionados en la carretera del castillo. «No es que sean muchos, pero multiplican la problemática», indica.
Hasta la fecha, el Ayuntamiento había impuesto alguna multa «esporádica» porque la prohibición de aparcar no estaba convenientemente señalizada. Ahora, con la instalación de carteles informativos, el Consistorio cree que ya no hay excusa para que los conductores no actúen de forma correcta.
El alcalde recuerda que hace dos semanas envió una carta a la presidenta Armengol solicitando la colaboración del Govern para garantizar la seguridad en los caminos rurales y asegura que ha recibido quejas de los vecinos de los caminos afectados por la dificultad para acceder a sus propiedades. Perelló lamenta también que, pese a las advertencias lanzadas al Govern, «no hemos recibido ninguna ayuda de Emergencias ni ningún otro organismo oficial».
