Los incívicos destrozaron en la madrugada del lunes un mural que se había instalado ayer domingo en la Plaça Alexandre Ballester de sa Pobla, durante la celebración del primer Festival 'Donant vida a la mort' y que pretendía ser un espacio de reflexión sobre la vida y la muerte en el que la gente tenía la oportunidad de apuntar sus reflexiones. El ayuntamiento de sa Pobla ha lamentó ayer por la mañana los destrozos causados por desconocidos sobre la obra que un día antes había sido creada por "una organización altruista y voluntaria", según la institución municipal.
Los incidentes ya han sido comunicados a la Policía Local de sa Pobla para tratar de identificar a los autores de este acto de incivismo. "Lamentamos estos hechos, que nos perjudican y dan una mala imagen como pueblo", señaló ayer el Ayuntamiento en las redes sociales, al mismo tiempo que agradece la participación de las personas que habían puesto en marcha esta iniciativa el domingo, durante el transcurso de un acto que se llevó a cabo "con total normalidad y con los protocolos sanitarios correspondientes".
El proyecto 'El Muro. Antes de morir quiero...' es una experiencia de arte global que invita a la gente a contemplar la muerte y reflexionar sobre su vida". Originariamente fue creado por la artista Candy Chang en una casa abandonada de su barrio de New Orleans después de la muerte de un ser querido. Desde entonces, se han creado más de 5.000 muros en 76 países del mundo y en unos 36 idiomas diferentes. El proyecto instalado en sa Pobla apenas ha durado 24 horas.
