Técnicos del área de Patrimonio del Consell de Mallorca iniciaron ayer los primeros análisis de una posible fosa ubicada en una propiedad privada de Cala Sant Vicenç (Pollença) en la que hace unos años, mientras se ejecutaban unas obras, aparecieron varios huesos humanos, tal y como avanzó ayer el Punt Informatiu de Pollença (PIP).
El alcalde Tomeu Cifre confirmó a este diario que la institución insular le había comunicado que este viernes iniciarían la prospección para comprobar si aparecen más restos humanos en el jardín de la vivienda unifamiliar donde se hallaron los huesos.
En caso de que aparezcan nuevos restos, los técnicos deberán determinar su origen. Todas las posibilidades están abiertas, aunque el hecho de que en el primer hallazgo salieran a la luz restos de ropa y zapatos descartaría que se trate de huesos de gran antigüedad. En principio, las hipótesis más probables serían que pertenecen a restos de personas enterradas durante la guerra civil o los años posteriores o bien que fuese algún crimen sin resolver.
Cabe recordar que a poca distancia de la vivienda donde se produjo el hallazgo transcurre el llamado ‘Camí dels Presos’, construido por presos republicanos que eran obligados a realizar trabajos forzados. Allí, entre los años 1940 y 1942 estuvo operativo un campo de trabajo del franquismo, años que coinciden con la construcción del citado camino.
Hallazgo casual
Los restos humanos fueron descubiertos en el año 2017 por un trabajador de la construcción, mientras realizaba unas obras en una vivienda unifamiliar de Cala Sant Vicenç. El trabajador comunicó varios años después el hallazgo, después de que en primera instancia decidiese callar por temor a posibles represalias.
Finalmente, la información llegó al ayuntamiento de Pollença, gobernado entonces por Junts Avançam, que a su vez avisó al Consell de Mallorca. El departamento de Patrimonio se comprometió a aestudiar el caso, aunque no fue hasta ayer cuando se iniciaron las catas. Según el alcalde Tomeu Cifre, la institución insular estaba pendiente de una autorización judicial para poder abrir la posible fosa.
Este asunto ya fue tratado el pasado mes de marzo durante una reunión de la Comissió d’Estudis per a la Veritat, Justícia i Reparació constituida en el seno del ayuntamiento de Pollença, cuando este organismo solicitó al Consell que avanzase en el estudio de esta posible fosa común ubicada en Cala Sant Vicenç. A lo largo de esa reunión, los miembros de la comisión instaron a la institución insular a investigar con urgencia el hallazgo de restos humanos en el núcleo costero de Pollença.
