La plaza Ramon Llull de Manacor acogió este sábado por la tarde una masiva concentración de repulsa por la muerte del gato 'Grisito', que fue torturado por un grupo de jóvenes, unos hechos que despertaron una oleada de indignación en la sociedad.

La protesta promovida por entidades animalistas se convocó con el objetivo de reclamar que se modifiquen las leyes para endurecer las penas contra las autores de cualquier tipo de maltrato animal.

Durante el acto, intervinieron diversos representantes de colectivos animalistas que instaron a las administraciones a actuar más duramente para evitar que haya "miles de Grisitos, como hay actualmente a nivel estatal.

Lamentaron además que las ordenanzas municipales sobre bienestar animal estén "obsoletas", al tiempo que consideraron necesario que los ayuntamientos "se responsabilicen y no miren para otro lado".

En un momento de la concentración, hubo cierta tensión. Se produjo cuando intervino, como representante del ayuntamiento de Manacor, el concejal Carles Grimalt, quien expuso la postura municipal. Fue interrumpido por algunos gritos y por la intervención de una de las asistentes, que se quejó de la desprotección que sufren los animales en Mallorca.

Entre el numeroso público, se encontraba el director general de Derechos de los Animales del Gobierno Central, Sergio García Torres.

En relación a estos hechos sucedidos en agosto, dos jóvenes fueron arrestados como presuntos autores de un delito de maltrato animal.