El Consell de Mallorca ha reabierto el tramo de la carretera de la Serra de Tramuntana y de la que une ésta con la localidad de Esporles afectados por el tornado del pasado sábado, una vez finalizadas las tareas de limpieza de las vías.
Según ha informado este lunes el departamento de Carreteras de la institución insular, los cortes ya solventados afectaban a un tramo de la MA-10 (la vía que atraviesa la Tramuntana) entre el kilómetro 75 y 80 y a la MA-1100 desde la Granja de Esporles hasta su intersección con la MA-10.
El temporal afectó sobre todo al municipio de Banyalbufar y a su localidad costera del Port des Canonge, que ahora contabilizan los daños de lo que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) de Baleares ha evaluado como un reventón meteorológico y "probablemente" un tornado, con vientos que pudieron ser superiores a 150 km/h.
Un reventón es una fuerte corriente descendente de aire que se suele originar en una nube de tormenta y ocasiona vientos destructores, con una dimensión horizontal inferior a diez kilómetros y un tiempo de vida que puede ir de cinco a treinta minutos.
Estos fenómenos meteorológicos no causaron ningún daño personal, pero sí numerosos materiales en bosques y edificios, y una quincena de personas tuvieron que ser rescatadas por la Guardia Civil de viviendas en las que se habían quedado aisladas.