Miembros de la organización Gadma denunciaron ayer en rueda de prensa la construcción de una carretera para el acceso a una cantera de Binissalem. El incesante tráfico de vehículos pesados es el argumento empleado por la compañía para ampliar la vía, hasta unos diez metros.

Los representantes de Gadma convocaron por la mañana a los medios para explicar las claves de su denuncia. Según expusieron, esta cantera, anteriormente, era explotada por una empresa familiar, que trabajaba casi de forma artesanal. Sin embargo, de acuerdo a este relato de los hechos, posteriormente decidieron venderla a una compañía de Maria de la Salut ante los problemas burocráticos, la excesiva carga fiscal que debían afrontar y las dificultades que entrañaba la explotación.

Sin permisos

La nueva empresa explotadora del lugar es la responsable, según alertó esta organización conservacionista, de construir una gran carretera desde la entrada hasta el interior de la cantera.

La entidad Gadma refirió a los medios de comunicación que por este camino están pasando vehículos de "hasta 30 ó 40 toneladas, con su correspondiente tráiler".

Una vez conocida la denuncia de Gadma, ayer, este diario intentó contactar, sin éxito, con el alcalde de Binissalem, Víctor Martí, para que se pronunciase sobre las quejas de que esta carretera se haya habilitado en una zona ubicada en el entorno de la Serra de Tramuntana.