El equipo de gobierno integrado por PSOE y Podem-Més en Calvià tumbó ayer con sus votos la moción del PP que proponía al Ayuntamiento instar al Govern a dar marcha atrás a la orden de cierre de los locales de ocio de Punta Ballena y otras dos calles de Magaluf y a elaborar un plan de acción policial "contundente y constante" en las zonas más conflictivas del municipio.
La portavoz popular, Luisa Jiménez, argumentó que los altercados que se difundieron por las redes sociales y que aceleraron la orden del Govern se produjeron con los locales de ocio ya cerrados, por lo que no son responsabilidad de los empresarios y sí de las fuerzas de seguridad y añadió que la medida "condena" a la oferta complementaria a la "quiebra" sin "tener ninguna culpa". A su entender, la medida del Govern es "precipitada, discriminatoria y poco efectiva" ya que "traslada" los comportamientos inadecuados de los turistas a otras zonas del municipio.
Tanto Ciudadanos como Vox expresaron su acuerdo con la propuesta del PP. "Una cosa es hacer política contra el turismo de excesos y otra hacer política de excesos contra el turismo", apuntó la portavoz de Cs, mientras que la representante de Vox tildó la decisión de "medida dictatorial" y acusó al Govern de "criminalizar" a los empresarios.
Por su parte, la teniente de alcalde socialista Natividad Francés admitió que la medida decretada por el Govern "es dura, difícil y tiene efectos colaterales de mucho calado", aunque añadió que "estamos hablando de salud pública". "El PP no ha hecho ninguna mención a la salud pública ni a la seguridad sanitaria en su moción", señaló. La representante del equipo de gobiernoaseguró que los empresarios de Punta Ballena "interesan" al gobierno local, pero precisó que esta zona de Magaluf "ya estaba herida por el Covid-19, que es el enemigo".
El alcalde Alfonso Rodríguez Badal (PSOE) defendió el papel de las fuerzas de seguridad y ha acusado a la oposición de "manchar la imagen del destino" difundiendo los videos de los excesos. "Una oposición responsable vela por el destino, como hicimos nosotros, pero ustedes han puesto a contar la máquina de votos", señaló.
También recordó que la pandemia ha motivado "decisiones durísimas" a todos los niveles y que en este caso ha sido el Govern la institución que ha decretado el cierre. El alcalde anunció que habrá propuestas para ayudar a los empresarios afectados.
A las 16 horas, cuando estaba previsto el inicio del pleno municipal, un grupo de empresarios y trabajadores de Punta Ballena intentarón acceder a la sala de plenos, aunque se les prohibió el acceso por motivos de seguridad sanitaria. Los manifestantes se quedaron en el exterior del Ayuntamiento, donde reclamarón la reapertura de los locales, y siguieron la evolución del pleno en directo a través de sus teléfonos móviles.
El Toro Intervención contra la instalación de antenas de telefonía
Al final del pleno de ayer, una vecina de El Toro, Elena Pellejero, intervino en nombre de otros 668 residentes del núcleo 'calvianer' para reclamar al Ayuntamiento que aleje del casco urbano las antenas de telefonía móvil que están instaladas o en construcción en la urbanización. Estos vecinos han estampado su firma en una campaña contra las antenas.
También solicitó que se reubique el resto de antenas del municipio fuera de los núcleos urbanos y que "entre todos los grupos políticos consensúen las parcelas en las cuales se podría unificar la instalación de este tipo de infraestructuras para el presente y para el futuro del municipio".
Asimismo, entre otros puntos, reclaman que los convenios que se firmen con las operadoras "establezcan una cláusula de limitación de tecnología" para "no darles carta blanca" y un estudio para comprobar si las antenas existentes en el municipio cumplen con la ordenanza.
