El departamento de Movilidad e Infraestructuras del Consell de Mallorca empezó ayer a probar en Cala Deià un sistema de control de capacidad de vehículos que permite dar información en tiempo real de la ocupación de coches en la zona. El proyecto está enmarcado dentro de la plataforma Smart Island, que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de la ciudadanía de Mallorca y regular la actividad turística mediante actuaciones en el ámbito tecnológico.

El conseller insular de Movilidad e Infraestructuras, Iván Sevillano y los alcaldes de Deià y Valldemossa, Lluís Apesteguia y Nadal Torres, respectivamente, pudieron comprobar in situ el funcionamiento del dispositivo que tiene como objetivo "procurar una gestión más eficiente del tráfico en beneficio tanto de residentes como de turistas", según la institución insular.

La estación móvil lleva integrado un sistema de recogida de información del paso de vehículos así como del nivel de ocupación por tráfico rodado en determinadas carreteras que tienen salida difícil o recursos escasos para aparcamiento. Los datos son mostrados a los conductores a través de paneles móviles de mensaje variable.

"La intención es evitar una afluencia masiva de vehículos que generen congestiones en parajes protegidos, una actuación similar a la que llevamos a cabo hace una semana en Cala Varques (Manacor)", aseguró Iván Sevillano. Además de monitorizar la información en tiempo real y de dar información de la situación del tráfico, el dispositivo registra los datos históricos para el análisis estadístico posterior, "cosa que permitirá poder incidir en una futura reordenación de la movilidad y hacerla más respetuosa con el entorno", añadió Sevillano.

Está previsto que en las próximas semanas se instale otra estación similar en el Puerto de Valldemossa. A finales del mes de septiembre se espera disponer de tres sistemas más de control de la capacidad. La ubicación variará a lo largo del año según las necesidades. En verano, se controlarán prioritariamente las zonas más saturadas, para regularlas, y en invierno, el control de la capacidad se hará prioritariamente a la zona de la Serra de Tramuntana.