El equipo de gobierno de Pollença (Tots per Pollença, UMP, PP y El Pi) tiene previsto elevar al próximo pleno la aprobación provisional del catálogo de protección de edificios y elementos de interés histórico, artístico, arquitectónico y paisajístico del municipio, un documento en el que finalmente no estarán seis edificios singulares ubicados en la primera línea del Port de Pollença.

El principal grupo de la oposición, Junts Avançam, denunció ayer que la decisión municipal "pone en peligro la conservación" de los inmuebles. Se trata de Can Mena, Can Morató, Can Tugores, Ca l'Adroguer y Can Ques, además de Can Franc.

Según el citado grupo político, el Ayuntamiento ha hecho caso omiso al Consell de Mallorca, que "en dos ocasiones ha reclamado la inclusión de estos edificios en el catálogo que tramita el Ayuntamiento". Junts Avançam recuerda que en la pasada legislatura el equipo de gobierno presidido por este partido incorporó estos edificios al catálogo, pero el actual gobierno local los ha eliminado del inventario.

Así, el exalcalde Miquel Àngel March explica que el Consell ha reclamado en dos ocasiones la inclusión de los edificios, tanto en un informe de la dirección insular de Patrimonio Histórico de junio de 2008 como en una sesión de la comisión insular de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Patrimonio, que en septiembre de 2010 suspendió la aprobación definitiva del catálogo para corregir diversas deficiencias. Este organismo determinó entonces que los edificios descartados "tienen valor patrimonial a escala local".

Según Junts, la decisión no está justificada desde el punto de vista arquitectónico ni técnico, por lo que atribuye la exclusión de los inmuebles al "miedo" del equipo de gobierno a posibles indemnizaciones.