Después de unos meses de parada obligada por el coronavirus y la cuarentena, el pasado sábado 18 de julio se retomó la competición balear de trial base con la celebración del IV Trial Base de Santa Maria del Camí, organizado por el Motoclub Escudería l'Ofre, en las instalaciones del área de Trial de este motoclub.

Este reinicio de la competición empezó con un respetuoso y emotivo minuto de silencio en recuerdo del piloto de trial Adolfo Caballero Pons, recientemente fallecido. La tarde dejó instantes de mucha calidad con unos pequeños pilotos que demostraron haber superado muy positivamente este tiempo de confinamiento.

En la categoría Iniciación escuelas, Maxi Jareño, se atrevió con el trazado diseñado para pilotos mayores e hizo una buena carrera en una categoría de exhibición.

En cuanto a la categoría Base automáticas, Samuel Barrero se situó en la 3.ª posición, mientras que Miquel Salvà se situó justo por delante, en la 2.ª plaza. El primer lugar fue para Joan Martorell que subió a lo más alto del podio.

Respecto de la categoría Base eléctricas, el tercer lugar fue para Marc Ribas, mientras Joan Perelló se situó en el 2.º lugar de la clasificación final. El primer lugar del podio fue para Toni Cardona que firmó una excelente carrera.

En la categoría Iniciación 80, la más numerosa y disputada, el tercer lugar fue para Toni Jaume, seguido de Víctor López en segunda posición, con su moto eléctrica. En el primer peldaño del podio fue para Lluís Salort que venció en esta complicada categoría.

En la categoría Open Base, el piloto local Lluc Llinàs empezó la temporada de manera contundente, con una gran carrera que le supuso la primera posición del podio final.

Cabe destacar la responsabilidad mostrada por todos los deportistas, acompañantes y público asistente que mostraron un respeto absoluto a las estrictas, pero imprescindibles, medidas de seguridad establecidas por el motoclub.